La tecnología de intercambio de baterías ha hecho a muchos creer en la electrificación. En China son muchos los clientes que han optado por ‘comprar’ este servicio que ofrecen varias marcas, como NIO. Esta también está presente en Europa, aunque de una manera mucho más discreta. A España ha llegado hace unas semanas de la mano de Stellantis.
Este avance es notablemente cómodo para muchas personas que no quieren o no pueden tener un punto de carga en el hogar. Una vez se haya agotado la carga de la batería, el usuario acude a una estación de intercambio de baterías y allí, automáticamente, la maquinaria sustituirá la batería vacía por otra a plena carga en cuestión de unos pocos minutos.
Hasta ahora, este avance se ha visto realmente llamativo para multitud de clientes de coches eléctricos. Sin embargo, los avances en la electrificación no sólo llegan para este tipo de mecánicas, sino también para los híbridos enchufables. Tanto es así que este intercambio de baterías ya es una realidad para este tipo de versiones.
La propuesta de Geely es un intercambio de baterías para coches híbridos
Los coches híbridos son cada vez más avanzados, ya cuentan con autonomías incluso propias de un eléctrico ‘puro’. Esto también sucede con los de autonomía extendida (EREV) que cuentan con un motor térmico que actúa como mero generador para alimentar la batería.
Ahora, desde Geely, la compañía ‘prima hermana’ de otras europeas, como Volvo, Polestar, Lotus o Smart, por citar algunas, acaban de presentar el Haoyue R7, un SUV EREV con capacidad para intercambiar su batería. Este cuenta con un aspecto muy similar al Geely Livan 7, su versión 100% eléctrica que también puede sustituir su batería.
Estéticamente se presenta como un SUV de tamaño medio. Sus cotas son: 4.690 mm de longitud, 1.892 mm de anchura y 1.650 mm de altura. Su distancia entre ejes es de 2.778 mm. Su línea de perfil se caracteriza por tener una caída de corte coupé muy llamativa. Lo mismo sucede en su habitáculo, pues ofrece una pantalla central de diseño flotante con 15,6 pulgadas y un correcto espacio habitable interior.
Pero lo que más llama la atención de este coche es su mecánica. Incorpora un motor 1.5 litros de gasolina, atmosférico y que desarrolla una potencia de 110 CV. Este únicamente sirve como extensor de autonomía, es decir, como mero generador eléctrico para alimentar a la batería de química LFP.
Según han podido saber desde el medio CarNewsChina, una vez salga a la venta, la marca ofrecerá la compra del mismo con una opción que no incluirá la batería en propiedad. Esto supondrá que el precio de adquisición será realmente más bajo, pero que el cliente, lo más probable, es que pague una suscripción mensual para tener acceso al programa de intercambio. Por ahora no se han definido precios ni detalles concretos. Esto es algo que será desvelado dentro de sólo unas semanas, cuando el Geely Haoyue R7 salga a la venta en China.