No es habitual que las marcas hablen de su competencia y mucho menos que piropeen sus buenas maniobras. La competitividad obliga a pensar de forma diferente, aunque hay veces que no se entienden determinadas posturas. Mary Barra, la CEO de General Motors, no ha podido si no reconocer que en estos momentos Tesla lleva la delantera en cuanto a ventas, pero su visión de futuro es bastante diferente a la que Elon Musk lleva años predicando. La directora del conglomerado americano tiene serias dudas sobre la rentabilidad de los eléctricos de precio razonable.
Es imposible no reconocer que en estos momentos Tesla es el rival a batir en el campo de la electrificación. Vende más que nadie, fabrica más que nadie y, lo que también es importante, lo hace con mucha más rentabilidad que nadie. Barra ha declarado que su rival ha conseguido lo que ninguna otra compañía ha logrado, pero también ha advertido que ese liderazgo no será permanente. Estas reflexiones han sido recogidas por Electrek durante una conferencia en Estados Unidos en la que se departía sobre la situación actual del mercado.
Si bien Tesla está consiguiendo unos registros de ganancias excepcionales por cada coche que vende, sus rivales no pueden ni acercarse a las cifras de los de Austin. En General Motors tienen muy claro que los coches eléctricos asequibles, entre 30.000 y 40.000 dólares, no son, por ahora, rentables. El principal problema es el coste de producción de las baterías, demasiado elevados como para producir en masa coches eléctricos baratos. Este problema no lo tiene la compañía de Elon Musk, que lleva ganando ventaja desde hace más de una década. Por ahora, sólo los fabricantes chinos como BYD pueden poner en aprietos al gigante americano.
Barra ha ido un poco más allá en sus declaraciones. Según ella, la rentabilidad de los eléctricos asequibles no llegará hasta finales de la década o incluso más tarde. Resulta extraño que la jefa de General Motors realice estas declaraciones cuando no hace mucho declaró todo lo contrario. El Chevrolet Bolt es uno de los eléctricos más baratos de Estados Unidos con un coste de partida aproximado de 26.500 dólares, aunque cesará su producción a finales de año. Para más INRI, Chevrolet pronto sacará a la venta el Equinox EV con una tarifa de salida próxima a los 30.000 dólares.
La cuestión es que General Motors no es la única compañía que está teniendo problemas para alcanzar la rentabilidad con sus eléctricos. Los americanos habían propuesto modelos muy interesantes y de precio razonable, pero, por ahora, sus máximas figuras son el Hummer EV y el Cadillac Lyriq. Ninguno de los dos es un coche de volumen y muchísimo menos se puede decir que sean coches de precio razonable. A pesar de ser un éxito en cuanto a ventas, el Bolt pronto nos dejará y no parece que vaya a haber un relevo para él.
Tesla espera dar la campanada dentro de poco con el lanzamiento del Tesla Model 2. El propio Musk ha declarado que ese será el coche que revolucione el mercado eléctrico gracias a un precio de venta entre 25.000 y 30.000 euros. La rentabilidad se consigue no sólo con proveedores que fijen precios más razonables, sino con un volumen de producción desmesurado. La nueva fábrica de México será la encargada de producir el Model 2 cuando este llegue al mercado con un nuevo sistema de ensamblaje que promete reducir los tiempos y mejorar, aún más, la rentabilidad.
