El fabricante chino de vehículos eléctricos BYD ha negado categóricamente los rumores sobre una supuesta reducción en la producción de vehículos eléctricos en China. La compañía respondió tras ver varias publicaciones en medios que sugerían una desaceleración en las operaciones debido a un presunto aumento de stock y una bajada en las ventas.
Según informó Reuters, fuentes cercanas al asunto aseguraron que BYD había disminuido turnos de producción en varias de sus plantas, retrasado planes de expansión de líneas de montaje y reducido su capacidad operativa hasta en un tercio en algunas instalaciones. Sin embargo, la empresa ha salido al paso de estas informaciones, asegurando que la producción se mantiene estable y que las ventas siguen creciendo de forma constante.

Una fuente interna citada por el medio especializado CnEVPost afirmó que el nivel de inventario en los concesionarios es “razonable” y que los datos no reflejan ninguna señal de frenazo industrial. La aclaración llega en un momento delicado, tras la decisión de BYD el pasado 23 de mayo de rebajar el precio de 22 modelos de su gama hasta en un 34 %, medida que muchos interpretaron como una respuesta a una posible caída de la demanda.
Ventas récord en lo que va de 2025
Lejos de mostrar signos de debilidad, los resultados de BYD en lo que va del año son sólidos. Solo en mayo de 2025, la marca vendió 382.476 vehículos de nueva energía a nivel global, marcando su mejor mes del año. Las cifras incluyen tanto vehículos eléctricos puros (BEV) como híbridos enchufables (PHEV).
En los primeros cinco meses del año, BYD ha comercializado más de 1,76 millones de vehículos de nuevas energías, un incremento del 39 % respecto al mismo periodo de 2024. De ese total, 1,73 millones corresponden a vehículos de pasajeros, lo que representa un aumento del 37 %. Los vehículos eléctricos a batería lideran este crecimiento, con una subida del 40 % interanual.

La compañía mantiene su objetivo de vender alrededor de 5,5 millones de vehículos en 2025, lo que supondría un crecimiento cercano al 30 % respecto a 2024, año en que vendió más de 4,72 millones de unidades entre eléctricos puros e híbridos enchufables.
¿Desaceleración o consolidación?
Aunque los indicadores siguen siendo positivos, los analistas apuntan a una desaceleración del ritmo de crecimiento anual de BYD en los últimos años. La tasa, que en 2021 alcanzó el 218 %, cayó al 208 % en 2022 y al 62 % en 2023. Aun así, la empresa continúa expandiendo su cuota de mercado en China, que ha pasado del 15 % al 17 % en los últimos meses, según datos del sector.
Uno de los puntos críticos del debate ha sido el nivel de inventario en los concesionarios. Un estudio de la Asociación de Concesionarios de Automóviles de China reveló que BYD tenía en mayo un promedio de 3,21 meses de inventario, muy por encima del promedio del sector, que es de 1,38 meses. Este dato ha alimentado las especulaciones sobre un posible ajuste en la producción.
Expansión internacional y nuevos modelos
Pese a las controversias, BYD continúa con su ambiciosa estrategia de expansión global. Recientemente, uno de sus barcos, el “Xi'an”, partió rumbo a Europa cargado con unidades del modelo eléctrico BYD Dolphin Surf, confirmando el creciente peso de las exportaciones en el negocio de la compañía.
Además, su línea prémium Yangwang, con modelos como el SUV U8 y la berlina eléctrica de lujo U7, refuerza su apuesta por competir no solo en volumen, sino también en el segmento alto del mercado.