La implantación de los coches eléctricos está avanzando a un ritmo muy diferente según la región del mundo a la que se mire. China lleva la voz cantante, con unas ventas muy superiores al resto de mercados. Europa avanza a buen ritmo, pero por debajo de lo esperado. Y Estados Unidos es la que va más atrás. Respecto a por qué ocurre esto, RJ Scaringe, CEO de Rivian, tiene una opinión muy clara que no está alineada con lo que se piensa en general.
El Director Ejecutivo de la marca estadounidense participó el pasado martes en el Fortune Brainstorm AI, una conferencia que se llevó a cabo en San Francisco, EE. UU., donde habló de varios temas. Lo más interesante fue su punto de vista sobre los EV en el país: no se venden pocos porque la gente no los quiera, ocurre porque no tienen entre qué elegir.

Menos de 5 opciones interesantes a precio asequible
En Estados Unidos los eléctricos solo suponen una cuota de mercado del 8 %, una cifra significativamente inferior al resto del mundo. Respecto a qué ha llevado a esto, es claro: “Realmente creo que la limitación no reside en la demanda, sino en la oferta. Creo que hay una sorprendente falta de opciones; hay opciones mucho mejores en Europa. Y, con diferencia, la mayor oferta se encuentra en China”.
Cree que la variedad entre la que puede elegir un cliente interesado en un vehículo de baterías no es suficientemente amplia, especialmente si lo que se busca es un modelo asequible. Señaló que actualmente hay “menos de 5 coches que son buenas opciones” por un precio que sea cercano al coste medio de un coche nuevo en Estados Unidos. Allí, eso supone 49.814 dólares (según los datos de noviembre), mientras que la media de los eléctricos es de 58.638 dólares.
Puso de manifiesto que, cualquier estadounidense que a lo largo del año haya querido un coche eléctrico por un precio de 50.000 dólares o menos no ha tenido otra que conformarse con un Tesla: solo el Tesla Model 3 y el Tesla Model Y están dentro de ese presupuesto. “Y eso no refleja un mercado saludable con amplia variedad. Si lo piensas como consumidor, tienes 300 opciones diferentes de motores de combustión interna a ese precio o inferior, y quizás tengas una opción de vehículo eléctrico muy atractiva”, exponía.

Rivian está ultimando su eléctrico barato
Es por eso que la marca cree que hay un hueco en el mercado enorme y quiere ser una de las que ayuden a rellenarlo. Actualmente los R1T y R1S son bastante más caros que esa cifra, pero están ultimando los detalles del lanzamiento del Rivian R2, que será un vehículo más asequible que estará disponible desde unos 45.000 dólares.
Las cantidades de las que estamos hablando ponen de manifiesto la diferencia de la realidad económica del mercado estadounidense comparado con, por ejemplo, el español. Aquí 50.000 euros no equivalen a un coche eléctrico barato, es ya gama media o prácticamente alta. En toda Europa la barrera psicológica del eléctrico asequible se sitúa en rebajar los 20.000 euros.
Scaringe también aprovechó su intervención para señalar que desde Rivian están de acuerdo con el impulso que el gobierno de Donald Trump quiere dar a la industria nacional, pese a que el presidente choque de frente con los modelos de cero emisiones: “Creo que el impulso a la industrialización en Estados Unidos es apropiado, y es algo en lo que estamos muy alineados con la administración”.
