La historia de Tesla bien merece conocerla a fondo, con detalle, ahora que ya parece haber superado los tormentosos tiempos de sus inicios. A día de hoy, es la única 'start-up' de coches eléctricos que ha conseguido triunfar y escalar su producción hasta unos números realmente masivos. Existen fabricantes como Rivian o Lucid Motors que están consiguiendo salvar el cuello, pero la lista de las que han fracasado es larga: Faraday Future, Aptera, Fisker, Lightyear, Sono Motors, Dyson EV, Nikola, Lordstown... Hubo un tiempo en que también Tesla fue una novata en dificultades, pero ahora es el ejemplo a seguir de la industria.
Desde luego, no lo es por sus cuestionables controles de calidad (por llamarlos de alguna manera) en la línea de producción, ni por los acabados de sus vehículos o el servicio posventa. Pero todos envidian y admiran, algunos incluso con reconocimiento público, la manera en que Tesla ha conseguido fabricar coches eléctricos al ritmo que lo hace y con el margen de beneficio al que lo consigue, mayor que ningún otro fabricante de gran volumen.
Tesla la fundaron hace veinte años, en julio de 2003, Martin Eberhard y Marc Tarpenning. Cinco años después, Elon Musk se unió a la compañía como director ejecutivo. A finales de 2010, Tesla compró una antigua fábrica en Fremont (California) que habían utilizando conjuntamente Toyota y General Motors, y en 2012 empezó a fabricar el Tesla Model S, su primer coche de producción en serie y en gran volumen. Dicho de otra manera, Tesla lleva poco más de una década haciendo coches.
La travesía hasta llegar aquí ha estado plagada de dificultades, incluyendo un par de experiencias cercanas (muy cercanas) a la bancarrota. No fueron pocos los que dudaban de su viabilidad a largo plazo. Esta semana, la compañía ha anunciado la fabricación de su coche número 5 millones. Han tardado algo más de una década en construir cinco millones de coches eléctricos, pero lo más sorprendente es que los últimos cuatro millones de vehículos se han fabricado en apenas tres años. Una evolución digna de admirar.
Más de 3 coches eléctricos por minuto
En marzo de 2020, poco antes del confinamiento, Tesla anunció que había fabricado un millón de coches. Ese año conseguiría también su primer ejercicio anual con beneficios. Necesitó ocho años en conseguir ese hito. Desde marzo de 2020 hasta la fecha de este artículo, en septiembre de 2023, ha fabricado cuatro millones.
Todavía más sorprendente es el hecho de que han necesitado sólo seis meses y medio (199 días concretamente) para fabricar otro millón de coches más. En marzo de este año, la compañía anunció en redes sociales la fabricación su coche cuatro millones, que salió de la Giga Texas; esta semana ha salido de la fábrica de Shanghái el Tesla cinco millones, un Model 3 'Highland' de color blanco. Esto equivale a fabricar 5.000 coches cada 24 horas o 3,5 coches por minuto.
No hay que ser muy hábil con las matemáticas para saber que la capacidad productiva de Tesla está ya muy cerca de las dos millones de unidades anuales. La compañía que dirige Elon Musk fabrica más coches eléctricos que todos los fabricantes alemanes juntos. A día de hoy, ya son muy pocos los que dudan o se burlan de Tesla como fabricante de vehículos. Su capacidad disruptora en una industria tan conservadora le ha colocado como la compañía automovilística más valiosa del mundo.
De 'start-up' dudosa a referencia mundial
Tiene cinco plantas -conocidas como Gigafactorías- repartidas en Estados Unidos (Nueva York, Nevada y Texas), Alemania (Berlín) y China (Shanghai). Esta última es la que más coches produce. Pronto empezarán a construir la sexta, en México, y se rumorea que habrá una séptima, cuya ubicación está pendiente de confirmarse.
Presume también, y con razón, de una infraestructura propia de recarga que ha superado ya los 50.000 cargadores rápidos en todo el mundo. Su próximo objetivo es conseguir fabricar el monocasco del coche en una sola pieza. Un método que nadie utiliza y que le permitirá fabricar coches de manera todavía más sencilla y rentable. Y en Estados Unidos, prácticamente todos los fabricantes, incluyendo Ford, General Motors, Mercedes-Benz o Volvo, han adoptado el estándar de carga de Tesla (NACS).
Tesla produce vehículos eléctricos como si no hubiera un mañana, pero no todo es color de rosas. Su sistema de conducción semiautónoma no se libra de polémicas y la Cybertruck, su primera pick-up, ya ha empezado a fabricarse después de numerosos retrasos en su lanzamiento, pero no alcanzará todo su potencial hasta bien entrado el 2024. A Tesla más le vale darse prisa, pues se dice que tiene más de dos millones de reservas. Los retrasos en los lanzamientos son prácticamente una marca de la casa y su camión eléctrico, el Tesla Semi, no ha sido menos.
En cualquier caso, el futuro es prometedor y en el horizonte ya se vislumbra el futuro coche económico de Tesla (el hipotético Model 2, aunque su nombre no está confirmado), un modelo cuyo lanzamiento está previsto para 2025 y cuyo precio estará por debajo de 30.000 euros.
