Un motor de las conocidas SR/S - SR/F de Zero Motorcycles dentro del capó de un Mini Cooper del año 1966. Esa es la curiosa confluencia de dos mundos que, hasta hace nada, parecía imposible. A la criatura la han bautizado como Mini Z-Force y la cabeza pensante de tal 'trabajo de orfebrería' ha sido el CTO de Zero Motorcycles, Abe Askenazi.

¿Que queremos 'electrificar' un coche? Pues nada de pensar en kits de transformación ni cosas por el estilo: cogemos directamente el motor de la motocicleta que más nos guste y se lo adaptamos a nuestro coche.

Parece, a simple vista, sencillo, pero la verdad es que el trabajo ha requerido muchas horas de esfuerzo, aunque el resultado ha sido impecable.

"Decidí que tomaría el grupo motopropulsor que se encuentra en nuestros modelos SR/F y SR/S y lo trasplantaría al Mini con las menores modificaciones posibles". Abe Askenazi.

El Mini Cooper fue adquirido a un piloto de coches de San Diego (California, USA) que había estallado el motor, por lo que era ideal para hacer la conversión a eléctrico. Y, como donante del 'corazón/motor', el motor usado de una Zero SRS de 2020.

"Eliminé todo el contenido restante de combustión interna (incluido su sistema eléctrico original) del Mini. Cuando estuviera completo el trabajo de desmantelamiento, quería que el grupo motopropulsor de la Zero no se diera cuenta de que estaba moviendo un Mini en lugar de la motocicleta donante original", prosigue Abe.

El mayor desafío vino del hecho de que el motor original del mini integraba también el diferencial y el sistema de propulsión (a las ruedas delanteras).

Tuvieron que adaptar un diferencial delantero de un BMW X5 y un conjunto de piñones con su correspondiente correa.
El resultado, un pequeño coche del año 1966 acelerando en el 0-60 mph (0-96 km/h) en ¡solo 5 segundos! y alcanzando una velocidad máxima de 75 Mph (120 km/h). Y es que el motor Z-FORCE 75-10 de Zero ofrece un par motor de 190 Nm y desarrolla una potencia de 83 kW.