El mercado de la bicicleta y, en particular, el de la bicicleta eléctrica, ha crecido de forma exponencial en los últimos años. Esto ha provocado que el número de empresas relacionadas con este sector también se haya incrementado. Bajo esta premisa, se ha podido observar un mayor aumento de medidas de seguridad para un colectivo especialmente vulnerable en caso de accidentes. ¿Y si tuviesen los ciclistas una especie de avisador automático sobre la presencia de vehículos en los alrededores? Un nuevo aparato ya lo permitiría.
En este artículo vamos a anlizar su funcionamiento para conocer hasta qué punto es susceptibe de ser una tecnología que podría salvar muchas vidas si se estandarizase. Se trata de una especie de gadget que ofrece diversas funcionalidades, ya que dispondría, adicionalmente, de su propio sistema de visibilidad mediante testigos luminosos. ¿En qué consiste y cómo funciona esta tecnología? He aquí todas las claves.
Un sistema de radar que aumenta la seguridad del ciclista
Los ciclistas están particularmente expuestos en los accidentes de tráfico que ocurren fuera de poblado. El Ride Safety System RS 1000 que es como así se denomina esta tecnología, ha sido obra de la empresa Alps Alpine. Conectado con el smartphone, este sistema es capaz de mostrar alertas luminosas en caso de advertencia de peligro. Para ello, recopila la información de todo lo que ocurre a nuestro alrededor en tiempo real. Es, sin duda, una propuesta que cuenta con una serie de soluciones curiosas.
Gracias al empleo de su propio equipamiento basado en inteligencia artificial, puede advertir una potencial amenaza en cualquier momento. La cámara ofrece una nitidez de calidad HD que permite conocer en todo momento la presencia de vehículos en la parte trasera. Es decir, se trata de un sistema que permite tener visión de lo que ocurre detrás gracias a la información suministrada a través del teléfono móvil. Es una propuesta muy interesante cuando se circula en áreas poco iluminadas en las que hay presencia constante de vehículos.
A los mandos de una bicicleta eléctrica, este dispositivo puede sacar el máximo partido posible, gracias a su capacidad para desarrollar su labor sin tener que preocuparnos por la autonomía. Es una propuesta muy interesante desde el punto de vista de la innovación, ya que puede desempeñar su trabajo sin acudir a la red de corriente convencional. Aun así, cuenta con una batería interna para poder ser compatible con bicicletas convencionales sin asistencia al pedaleo.
En relación con la durabilidad del producto, dispone de calidad de certificación IP55 e IP57 frente al polvo y el agua. Tal y como se puede leer en la página web oficial del producto, está disponible a un precio de 449 euros. Es el precio que hay que pagar para poder disfrutar de una solución de seguridad novedosa y con un gran potencial por delante.