El Volkswagen ID.3 ha demostrado una notable durabilidad en una rigurosa prueba de resistencia realizada por el ADAC, el principal club automovilístico de Alemania. Tras recorrer 160.000 kilómetros en cuatro años, la batería de alto voltaje del vehículo eléctrico conservó el 91 % de su capacidad neta, superando las expectativas y confirmando la fiabilidad de la tecnología moderna en los vehículos eléctricos.
Rendimiento excepcional de la batería

En la prueba, los ingenieros del ADAC desmontaron un Volkswagen ID.3 Pro S con 204 CV de potencia que monta la batería de 77 kWh de capacidad. Los resultados fueron sobresalientes, pues el paquete de baterías no presentó fallos. Volkswagen garantiza una capacidad mínima del 70% durante ocho años o 160.000 kilómetros en sus modelos eléctricos ID., pero este vehículo superó ampliamente ese umbral con un 91 % restante. Es decir, de los 554 kilómetros de autonomía que promete cuando es nuevo, según el protocolo WLTP, todavía mantiene 504 kilómetros teóricos.
Este desempeño subraya los avances en la tecnología de baterías de iones de litio, fundamentales para los coches eléctricos ya que impactan directamente en la autonomía, el valor de reventa y la satisfacción del propietario. Para quienes aún dudan sobre la degradación de las baterías, estos resultados demuestran que, con un diseño adecuado, los eléctricos pueden mantener su eficiencia al nivel de los vehículos tradicionales.
Las bondades de las actualizaciones de software

El software fue clave para optimizar el rendimiento del Volkswagen ID.3. Las actualizaciones periódicas redujeron el consumo de energía, especialmente en trayectos cortos y con temperaturas entre 0 °C y 5 °C, mejorando la autonomía en condiciones reales y aumentando su practicidad diaria.
Los evaluadores del ADAC destacaron que estas mejoras (que no requieren acudir al taller oficial) no solo aumentan la eficiencia energética, sino que prolongan la vida útil y la adaptabilidad del vehículo sin necesidad de cambios físicos, en línea con la tendencia de la industria del automóvil hacia vehículos más inteligentes y actualizables.
Robusta construcción y bajo mantenimiento
Más allá de la batería, el Volkswagen ID.3 demostró una gran integridad estructural. Tras 160.000 kilómetros, la carrocería y el chasis se mantenían en buenas condiciones, y componentes como los ejes, la suspensión y la dirección soportaron sin problemas el peso del vehículo.
El ADAC también elogió al ID.3 por sus bajos requerimientos de mantenimiento y su idoneidad para viajes largos, factores que reducen el coste de propiedad y mejoran la experiencia del usuario. Con un consumo combinado de entre 15,6–16,3 kWh a los 100 kilómetros y con cero emisiones de CO2, el Volkswagen ID.3 se consolida como una opción ecológica sin sacrificar fiabilidad.
Esta prueba refuerza la posición de Volkswagen en el mercado de vehículos eléctricos, donde la longevidad de las baterías y la robustez general son claves para ganarse la confianza del consumidor. En resumen, los hallazgos del ADAC consolidan al Volkswagen ID.3 como referencia en resistencia y durabilidad para vehículos eléctricos, combinando una batería avanzada con mejoras prácticas para un uso real superior.