Las ventas de coches eléctricos, por el momento, necesitan de incentivos, ya sean estatales o de las propias marcas, para seguir creciendo. Principalmente son los primeros los que tienen una mayor incidencia, como se ha demostrado en los periodos en los que se han quedado sin presupuesto o han estado inactivas, ya sea en España o en otros países europeos. En nuestro país, el Plan Moves III aporta hasta 7.000 euros si se achatarra un coche antiguo en el proceso, pero hay otra nación mediterránea que da una cantidad muy superior.
Se trata de Italia, donde las bonificaciones estatales por la compra de un coche eléctrico son de hasta 11.000 euros en el caso de compradores particulares y pueden llegar a ser de 20.000 cuando la adquisición es por parte de pequeñas empresas.

El fondo para esta iniciativa ronda los 600 millones de euros, cuantía con la que se espera promover el reemplazo de aproximadamente 39.000 vehículos de combustión por otros de cero emisiones. El gobierno considera que deberían agotarse antes de mediados de 2026.
Ayudas para renovar el parque obsoleto
En el comunicado oficial del gobierno italiano se puede leer que el proceso de solicitud se abrió el pasado 22 de octubre de 2025 a las 12 de la mañana y que la medida es parte del Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia (PNRR). De este se señala que “esta iniciativa, financiada con recursos europeos y complementaria a la inversión en la instalación de infraestructura de recarga eléctrica, tiene como objetivo facilitar la transición a la movilidad de cero emisiones apoyando a ciudadanos y microempresas que opten por sustituir sus vehículos contaminantes por vehículos eléctricos de nueva generación”.
Como cualquier tipo de ayuda de esta categoría, los solicitantes tienen que cumplir con ciertos requisitos: la solicitud debe presentarse antes de la compra del vehículo y para acceder a ella es obligatorio que quien solicite el incentivo se deshaga en el proceso de un automóvil de combustión antiguo, que cumpla con la normativa europea hasta la Euro 5 y que, además, haya sido suyo durante al menos 6 meses.
Condiciones por ingresos y lugar de residencia
Al contrario de lo que ocurre con las ayudas del Plan Moves III, en las que las ayudas son independientes del tipo de solicitante, en Italia tienen en cuenta que sea particular o empresa, así como los ingresos que tengan y el lugar en el que viven.
El importe exacto del subsidio para particulares depende del indicador económico ISEE (Indicatore della Situazione Economica Equivalente), que está basado en situación económica de la familia. Quienes tengan un ISEE de hasta 30.000 euros podrán recibir los 11.000 euros completos, mientras que los que se encuentren en el tramo de 30.000 a 40.000 euros tendrán un límite máximo de 9.000 euros. En el caso de las pequeñas empresas, el apoyo sirve para adquirir vehículos eléctricos ligeros destinados a uso comercial, llegando a cubrir hasta el 30 % del coste del mismo, siendo el tope máximo de 20.000 euros.
Otro aspecto llamativo que difiere de las ayudas que se conceden en España es que no vale para ciudadanos residentes en toda la geografía italiana, si no que están dirigido en especial a residentes en zonas urbanas densas y sus áreas de influencia: los solicitantes deben residir en ciudades con al menos 50.000 habitantes o bien en sus zonas de desplazamiento.
