Las baterías de estado sólido están llamadas a ser la próxima gran evolución de la movilidad eléctrica. Pilas capaces de expandir la autonomía de un coche eléctrico por encima de los 1.000 kilómetros. Cada nueva promesa es más grande que la anterior, pero la realidad es que hoy por hoy todavía estamos muy lejos de poder disfrutarlas de forma corriente. No lo decimos nosotros, lo dicen incluso las marcas. BYD ha tenido que desmentir oficialmente un rumor que llevaba tiempo circulando. No habrá un BYD eléctrico alimentado por baterías de estado sólido. No al menos a corto plazo.
Tras las muchas especulaciones surgidas al respecto el fabricante chino no ha tenido más remedio que aclarar las dudas: “La información es falsa. El primer modelo y sus especificaciones no se han anunciado oficialmente”. El rumor surgió a raíz de unos informes que sugerían que el BYD Seal estrenaría la nueva batería. Con una densidad energética récord de 400 Wh/kg se había anunciado una autonomía de hasta 1.500 kilómetros con una carga de 12 minutos. Algunos informes incluso indicaban una autonomía total de 1.875 kilómetros basándose en estimaciones de carga parcial. Sin embargo, el último comunicado de BYD aclara que la compañía no ha confirmado estos detalles.

Grandes promesas, pero sin fecha concreta para iniciar la producción
Estos avances se producen tras las declaraciones de Sun Huajun, director de tecnología de BYD, a principios de este año, en las que se describió el cronograma de la compañía para la comercialización de baterías de estado sólido. En la Cumbre de Desarrollo de Innovación de Baterías de Estado Sólido de China de 2025, Sun confirmó que BYD había comenzado a instalar prototipos de baterías de estado sólido en modelos Seal para realizar pruebas en carretera. Según Sun, se espera un primer despliegue en 2027 a modo de demostración. No será hasta 2030 cuando se produzca una introducción masiva de las baterías de estado sólido en el mercado general. Como siempre, el problema es escalar la producción. Algo en lo que trabajan todos los fabricantes.
BYD lleva más de una década desarrollando internamente la tecnología de baterías de estado sólido. La empresa comenzó a probar celdas de estado sólido de 20 Ah y 60 Ah el año pasado y, según se informa, logró avances clave en densidad energética y capacidad de carga rápida. A pesar de los prometedores resultados iniciales de las pruebas, incluyendo la posible paridad de precio con las baterías de iones de litio actuales para finales de la década, BYD ha enfatizado que la producción en masa aún está a años de distancia. Todas las compañías fijan los mismos plazos para la introducción general de las primeras pilas con electrolito sólido. Finales de la presente década o principios de la próxima.

Cada nuevo descubrimiento y paso en el camino demuestran que estamos ante una gran revolución. Cada semana surgen nuevos informes o rumores que incitan a soñar y a ser positivos. Huawei ha reconocido estar trabajando en una súper batería de estado sólido capaz de ofrecer hasta 3.000 kilómetros de autonomía y carga total en 5 minutos. Muchos fabricantes ya están probando las primeras celdas energéticas en coches de pruebas. Algunas compañías como Honda ya están iniciando las obras en las fábricas, pero no es más que un paso previo. Las primeras baterías de electrolito sólido surgirán en 2027, pero serán tan caras que solo unos pocos coches en el mundo podrán equiparlas y solo unos pocos clientes podrán pagarlas.