Los coches solares llevan mucho tiempo siendo la eterna promesa. Hace unos años hubo un boom con el anuncio, casi en paralelo, de varias compañías trabajando en proyectos con este enfoque. Todas ellas eran start-ups y, de manera paulatina, se han ido quedando por el camino. Curiosamente ha sido el vehículo con el aspecto más peculiar el que parece que será el único en llegar a buen puerto: el Aptera.
Aptera Motors Corp. acaba de anunciar que ha dado un paso significativo en su proceso de manufactura al iniciar la construcción de lo que denominan su “línea de validación” para vehículos. Este avance representa la transición desde la fase de prototipos hacia un proceso de ensamblaje más estructurado y repetible, lo que es el paso previo a poner en marcha en el futuro su línea de producción en bajo volumen.

Un paso importante hacia la producción
Chris Anthony, codirector ejecutivo de Aptera, ha declarado: “Esto marca un momento importante en la trayectoria de Aptera. Por primera vez, nuestros técnicos ensamblarán vehículos siguiendo una secuencia definida de estaciones, utilizando procesos desarrollados en conjunto con los ingenieros que los diseñaron”.
Se ha ubicado en su sede en Carlsbad, California, contando la nueva instalación con un elemento esencial para seguir avanzando en el proceso, una máquina de ensamblaje de gran escala diseñada para permitir que la carrocería en carbono (denominada “Body in Carbon”) sea construida con una precisión superior. Con ella no solo se consigue mejorar el flujo de trabajo, sino que también establece una línea técnica de base para la futura expansión hacia el montaje del modelo en bajo volumen. La empresa sigue avanzando y está ampliando su equipo de operaciones y continúa en proceso de contratar ingenieros y técnicos de línea de ensamblaje para apoyar esta fase de montaje.
Steve Fambro, codirector ejecutivo, añade: “Ver esta línea de producción en marcha marca el comienzo de la siguiente fase para Aptera. Es el puente entre nuestros prototipos y los sistemas de preproducción y producción en serie que esperamos utilizar algún día para ofrecer movilidad solar a gran escala”.

Así es el Aptera
El Aptera es un vehículo que, una vez esté disponible en la calle, va a llamar mucho la atención. Su diseño es de lo más peculiar, con un formato de dos ruedas delanteras y solo una central trasera, pero, sobre todo, por una estilizada carrocería con un habitáculo de forma redondeada que se alarga mucho por detrás.
El formato obedece al objetivo de instalar cuantas más células fotovoltaicas mejor. En total está equipado con unos 700 vatios, lo que permite que (en función del clima del lugar en el que esté) pueda recorrer hasta 65 km diarios con la energía solar que captan. De hecho, si a eso se suma la batería completamente cargada, promete una autonomía total que supera los 640 km. Aunque no es una bala, tampoco es un coche lento y es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en unos 6 segundos.
Su interior ofrece espacio para dos personas, así como una capacidad maletero de 325 litros. Es muy minimalista, con un volante cortado en la parte superior, un cuadro de instrumentos que no es tal, si no que está dividido en dos pequeñas pantallas que muestran las imágenes captadas por las cámaras que actúan a modo de retrovisores, así como una pantalla central que concentra toda la información, empleando un sistema multimedia que es compatible con Android Auto y Apple CarPlay.
