La electrificación no es algo exclusivo de nuestras carreteras. La maquinaria pesada también es una fuente importante de contaminación, algo que es especialmente contraproducente cuando se trata de la agrícola, ya que está en contacto con la naturaleza y con los alimentos que comemos. La compañía tecnológica ZF ha dado un paso importante en la electrificación del sector con el desarrollo de eTERRADRIVE, un sistema de transmisión modular e integrado pensado para tractores eléctricos
Según el fabricante, puede ofrecer potencias de entre 60 y 100 kW, tiene una sola unidad la tracción, tomas de fuerza mecánicas (PTO) y un sistema hidráulico de trabajo, además del elevador trasero. Además, tiene un tamaño compacto diseñado para que puedan montarlo vehículos de dimensiones relativamente contenidas (dentro de lo que es el sector).

Diseño compacto y modular para máxima flexibilidad
La compañía es clara en su enfoque “se priorizó un diseño compacto que garantiza la máxima flexibilidad de instalación en diversas plataformas de vehículos y anchos de vía. Su arquitectura modular y compacta ofrece una amplia aplicabilidad, desde cultivos especializados hasta explotaciones agrícolas municipales y convencionales”.
Se busca que el sistema se pueda aplicar al mayor número de plataformas posibles y lo llamativo es que no solo podrá hacerse en vehículos nuevos, ZF se ha encargado de que sea completamente compatible con las interfaces de modelos que ya están en el mercado, lo que facilita su integración en máquinas actuales sin necesidad de rediseños profundos. Gracias a ello, considera que es una alternativa interesante fabricantes y operadores que quieren avanzar en la electrificación sin comprometer su gama ya existente.
El nuevo sistema de transmisión incorpora una arquitectura electrónica avanzada, basada en una unidad de control adicional (eDCU) que se comunica con los sistemas ya existentes del vehículo, como el TCU (Transmission Control Unit) y el VDC (Vehicle Dynamics Control). Además, ZF ha integrado funciones de seguridad específicas para sistemas de alto voltaje, pensando especialmente en las necesidades que hay en aplicaciones todoterreno.
Una nueva vuelta de tuerca a la electrificación
El sistema de ZF cambia el formato que utilizan habitualmente los tractores electrificados. Por norma general, emplean transmisiones CVT hidroestáticas en las que un motor eléctrico sustituía al motor de combustión. Era una solución sencilla de implementar, pero que la marca apunta que tiene limitaciones: alta complejidad mecánica, mayores pérdidas energéticas y una escalabilidad reducida.
El eTERRADRIVE afronta el problema desde un nuevo enfoque. Integra dos motores síncronos refrigerados por aceite y un conjunto de engranajes planetarios. Esta configuración mejora la eficiencia operativa, permite un control más preciso del par motor y optimiza el uso de la energía. Además, como es un sistema bastante compacto, deja más espacio libre para almacenamiento de energía, lo que permite instalar baterías de mayor capacidad o depósitos de hidrógeno, consiguiendo en consecuencia una mayor autonomía.
También hay que señalar que el eTERRADRIVE ofrece todas las funcionalidades de un tractor convencional, incluyendo la recuperación de energía durante el funcionamiento, sin sacrificar potencia ni rendimiento, con la ventaja de hacerlo en modo cero emisiones, con lo que eso significa para el medio ambiente.
Resumiendo, ZF enumera las ventajas principales de su sistema:
- Funcionamiento completo con cero emisiones
- Menor complejidad mecánica y mantenimiento reducido
- Mayor eficiencia energética
- Plataforma escalable adaptable a futuros conceptos de vehículos
- Compatibilidad total con interfaces y estándares de seguridad actuales
