El futuro de la movilidad será eléctrico, pero mientras que la mayoría del sector está comprometida con los eléctricos de baterías (BEV), hay unos pocos actores que también están trabajando en la vía de los coches de hidrógeno. Marcas como BMW o Toyota están trabajando en el desarrollo de la pila de hidrógeno, pero uno de los mayores representantes de este por el momento anecdótico segmento es el Hyundai Nexo.
Se lanzó al mercado en 2018, pero su alcance a nivel internacional fue limitado debido a que la red de hidrogeneras era muy escasa y era poco factible utilizarlo en ciertos mercados, como por ejemplo el español. Desde entonces han pasado 7 años y la infraestructura es algo mejor, pero tampoco mucho, pero no ha sido impedimento para que la marca coreana lance una segunda generación con mejoras abundantes respecto a la primera entrega.

Nuevo diseño y más tecnología y equipamiento
El Nexo deja atrás las formas redondeadas del modelo original para lucir un diseño más maduro, con líneas más rectas y un conjunto que transmite una mayor sensación de estabilidad. Mide 4.750 mm de largo, 1.865 mm de ancho, 1.640 mm de alto y tiene una distancia entre ejes de 2.790 mm. Su capacidad de carga es considerable, ofreciendo un volumen de maletero de 993 litros detrás de la segunda fila de asientos y de hasta 1.640 litros cuando se abate esta.
El interior deja claro la búsqueda de posicionamiento premium del modelo, con tapicería en colores claros, superficies acolchadas incluso en el salpicadero, una pareja de pantallas curvas de 12,3 pulgadas cada una que envuelven el puesto de conducción, otras dos pantallas en las bases de los pilares A para proyectar las imágenes de las cámaras que ejercen de retrovisores, un sistema multimedia compatible con Android Auto y Apple CarPlay, sistema de reconocimiento de voz y un sistema de sonido Bang & Olufsen de 14 altavoces.
A esto añade una enorme lista de sistemas de asistencia a la conducción: asistente para evitar colisiones frontales, asistente de mantenimiento de carril, asistente para evitar colisiones en el punto ciego, advertencia de salida segura, asistente de salida segura, asistente inteligente de límite de velocidad, advertencia de atención del conductor, control de crucero inteligente, asistente de seguimiento de carril, monitor de visión trasera, etc.

Un sistema de propulsión mejorado
La clave del Hyundai Nexo está en su sistema de propulsión, una rareza entre los coches de producción de todo el mundo. En su segunda generación ha recibido mejoras tanto en su pila de combustible como en su sistema de electrónica de potencia. Este último duplica la potencia de la batería, pasando de 40 kW a 80 kW, mientras que la pila de combustible de hidrógeno es más eficiente, consiguiendo una potencia bruta máxima de 110 kW (un 16 % más que los 95 kW de su predecesor) y una potencia neta de 94 kW (un 11 % más que los 85 kW previos). Con esto, la potencia del sistema crece de los 135 kW a los 190 kW.
Gracias a ello, el nuevo motor eléctrico es capaz de desarrollar 150 kW, suficiente para acelerar de 0 a 100 km/h en 7,8 segundos (antes tardaba 9,2 segundos) y alcanzar una velocidad máxima de 179 km/h. Además, anuncia una autonomía de hasta 826 km según el ciclo de homologación WLTP y solo necesita 5 minutos para recargar su depósito de hidrógeno. A esto ayuda que la capacidad de los depósitos sea ligeramente mayor a la que tenía antes, pasando de 6,33 kg a 6,60 kg, sin sacrificar espacio interior para ello.
Hyundai también enumera otras mejoras que recibe el sistema: mejor funcionamiento a bajas temperaturas, una nueva función anticongelante ‘Wake Up’, una estructura de membrana más duradera y una mayor uniformidad de las celdas.
