Elon Musk ha cambiado la forma de ver el mundo y en la que se hacen negocios. El empresario americano, dueño y presidente de compañías como SpaceX o Tesla ha redefinido la figura del CEO. La imagen abierta al público de Musk contrasta con la de antiguos y encerrados presidentes que apenas se dejaban ver. Muchos son los que tratan de seguir los pasos del máximo responsable de Tesla, entre ellos RJ.Scaringe. El presidente de Rivian quiere parecerse tanto a Musk que acaba, al igual que él, de recibir un inmenso paquete salarial por valor de 4.600 millones de dólares durante la próxima década.
Durante los últimos años y meses, Musk ha estado peleando con la junta de accionistas de Tesla por una importante retribución monetaria por haber hecho de Tesla el gigante que es hoy y por haber hecho ganar mucho dinero a mucha gente con el precio de las acciones. Tesla ha pasado de ser un insignificante fabricante californiano a un gigante que ha transformado la industria para siempre. Aunque la compañía no está en tan buen momento como hace unos años, Musk ha presionado para conseguir el bonus que tanto cree merecer.

Bonificación en acciones con un valor de hasta 4.600 millones de dólares
La semana pasada, el 75% de la junta de accionistas de Tesla aprobó una retribución por valor de 1.000 millones de dólares. Un incentivo para que Musk siga al frente de la empresa tras haber anunciado este su renuncia en caso de no aprobarse el pago. Muchos han sido los que han criticado la medida económica, pero ahora, apenas unos días después, uno de sus imitadores ha hecho lo mismo multiplicando la cifra casi por 5. El camino de RJ.Scaringe transcurre paralelamente al de Musk, aunque la dimensión de Rivian como fabricante es bastante inferior a la de Tesla. A pesar de ello, el consejo de administración de Rivian ha querido recompensar a Scaringe por su trabajo.
El nuevo plan de remuneración de Scaringe está vinculado a objetivos de precio de las acciones más bajos. También depende de hitos económicos (beneficios y flujo de caja). Cuanto mayor vaya Rivian más grande será la recompensa para su fundador y presidente. Como suele ser habitual en este tipo de casos, el salario base es bajo -comparativamente hablando- mientras que los bonus y pagos adicionales son mucho más altos. Ahora mismo, el consejo de administración ha decidido duplicar el salario anual de Scaringe hasta los 2 millones de dólares.

No es nada con el dinero que podría ganar si finalmente Rivian consigue alcanzar los objetivos propuestos. Según el nuevo plan, Scaringe recibirá opciones para comprar hasta 36,5 millones de acciones de clase A de Rivian, unos 16 millones más que la concesión anterior, a un precio de ejercicio de 15,22 dólares por acción. La bonificación se consolidará si Rivian alcanza hitos de precio reducido de las acciones, que oscilan entre 40 y 140 dólares por título, en un plazo de 10 años, así como nuevos objetivos de ingresos operativos y flujo de caja durante los próximos siete años. La empresa no proporcionó detalles sobre en qué consisten dichos objetivos.