Trasladar las sensaciones de un coche de combustión a uno eléctrico no es trivial. Aunque los eléctricos son más limpios y entregan el par de forma inmediata, carecen de señales que construyen la conexión con el conductor, como el sonido del propulsor. De hecho, marcas como Hyundai han intentado cubrir ese vacío con “marchas” simuladas en sus N eléctricos, pero Ferrari quiere ir más allá con el Elettrica y hacerlo bajo sus propias reglas.
Gianmaria Fulgenzi, jefe de desarrollo de producto, lo explicó a InsideEVs: quien está habituado a deportivos echa en falta referencias táctiles y acústicas al pasar a un eléctrico. Y como la esencia de Ferrari es la experiencia al volante, Maranello ha trabajado intensamente en una solución específica para devolver esas sensaciones sin limitarse a una simple simulación.
Tener el control sobre el coche
“Cuando empezamos a desarrollar el coche, al acercarnos a una curva, empezamos a jugar con las levas. Necesitas algo que tocar cuando quieres activar el coche”, explica. Con esto se refiere a la sensación de bajar una marcha para “contener” el vehículo, sentir que lo tienes más sujeto, que se revolucione y, a partir de ahí, poder acelerar de nuevo en un rango de revoluciones óptimo para que su respuesta sea la que necesitas.
Lógicamente, con un eléctrico que entrega el 100% de su potencia y par en cualquier momento, esto no debería hacer falta, pero desde el punto de vista emocional y de la experiencia del conductor, sí. Es algo que no será necesario, por ejemplo, cuando se vaya a recoger a los niños del colegio, pero sí cuando el objetivo sea la conducción en sí misma: “Pero cuando quieres disfrutarlo un poco, necesitas algo que te conecte con el coche, que te comunique con el coche, que te involucre completamente con el coche”.
Para Ferrari se trata de la experiencia que ofrecen, algo que no quiere conseguir simplemente simulando marchas falsas. Su solución, que todavía no tiene nombre ni se ha detallado en exceso, estaría basada en “niveles de potencia”.
Sensaciones parecidas a las de un coche de combustión
“Lo más importante es que divide los niveles de par y potencia. Por eso, estamos diseñando cinco niveles diferentes que se pueden liberar sucesivamente. Así, durante el cambio a una marcha superior, se puede liberar toda la potencia del coche de diferentes maneras, como con las marchas”, señala Fulgenzi sobre el sistema.
“Cuando te acercas a una curva, ‘bajas la marcha’ con la leva izquierda, por lo que tienes la sensación emocional de un sistema de frenado de motor que puede crear una experiencia natural que está completamente conectada con la aceleración del cuerpo y también con el sonido que puedes escuchar", añade.
Gracias a esto se consigue que el conductor, que está acostumbrado a las sensaciones de coches de combustión, experimente algo similar, un conjunto en el que lo que hace con las manos va en consonancia con el movimiento que siente en su propio cuerpo por las fuerzas que transmite el coche y, no menos importante, con lo que oye.
Bajar o subir marcha en un coche térmico va acompañado de un cambio de revoluciones que es sonoro y que transmite bastante información. Eso se pierde en un eléctrico, lo que ha hecho que muchas marcas opten por crear sonidos falsos. A Ferrari tampoco le convence esta idea, pero como el Elettrica no tiene un motor de gasolina, ha optado por un camino intermedio.
Su sistema emitirá un sonido en el interior de la cabina que no será falso, pero tampoco verdadero. El sistema de sonido será, a grandes rasgos, un amplificador que potenciará las vibraciones que tenga el motor eléctrico mientras está funcionando, de manera que aumente en consonancia con la subida de revoluciones del propulsor.