No confundas más los coches con motor de combustión de hidrógeno con los eléctricos de pila de combustible

El hidrógeno se puede quemar para mover un automóvil y el sistema no es tan distinto al de una mecánica térmica tradicional.

En la imagen, prototipo del Toyota Corolla Cross H2 Concept.
En la imagen, prototipo del Toyota Corolla Cross H2 Concept.
28/10/2023 11:30
Actualizado a 29/10/2023 16:24

Hace años que se prueban los motores de combustión de hidrógeno en el sector del automóvil, pero lo cierto es que siguen siendo los grandes desconocidos. A menudo, se confunden con los coches de pila de combustible de hidrógeno, pero hay una gran diferencia. No son eléctricos.

Puede que en los últimos meses hayas escuchado hablar de las pruebas que realiza Toyota con modelos como el Corolla, que, si bien utiliza hidrógeno, lo que hace es quemarlo con una mecánica de combustión.

Has leído bien, de combustión. Un motor térmico de toda la vida, con algunas adaptaciones lógicas para poder trabajar con algo que no es ni gasolina ni diésel.

La tecnología no es nueva y ya hace años que el fabricante nipón y otros tantos están creando prototipos con los que buscan que los motores de combustión evolucionen de manera más respetuosa con el medio ambiente. O lo que es lo mismo, que contaminen menos.

Toyota mirai electrico pila combustible hidrogeno hamburgo interior1
Toyota Mirai eléctrico de pila de combustible de hidrógeno.

No debemos confundir esta tecnología con la de pila de combustible de hidrógeno, como la que usan los Toyota Mirai y Hyundai Nexo que se comercializan. Estos dos coches son eléctricos y utilizan depósitos de hidrógeno para, tras un complejo proceso químico, dar lugar a la electricidad que mueve su sistema de propulsión cero emisiones.

Pero en un automóvil con motor de combustión de hidrógeno no ocurre así. Como la denominación indica, lo que se consigue es obtener calor utilizando el hidrógeno o, mejor dicho, parte de su composición, como combustible. Exactamente igual que como se haría con un carburante de origen fósil.

Lo interesante es que, a diferencia de los combustibles fósiles, el hidrógeno no produce CO2, pues carece de carbono en su composición. Es decir, lo que se expulsa en la quema es sólo vapor de agua, por lo que es 100% limpio o verde, al menos en este sentido.

Prototipo Toyota Corolla Cross H2 Concept 3
Prototipo Toyota Corolla Cross H2 Concept.

Las mecánicas que se adaptan para quemar hidrógeno, pueden usar los sistemas de inyección de los motores de gasolina y diésel, pero necesitan ligeras adaptaciones, como también lo requiere el propio bloque para contar una lubricación óptima. Esto lleva a tener en cuenta que habrá emisiones de NOX y CO2, no del hidrógeno en la combustión, pero sí de los aceites y lubricantes que necesita el motor para trabajar en condiciones óptimas y para asegurar una larga vida útil.

Emisiones residuales, pero al fin y al cabo emisiones

El almacenamiento en estado líquido es un problema al que Toyota y otros fabricantes ya le encontraron solución, puesto que lo que hacen es conservarlo como gas a alta presión en los depósitos y, de esa manera, impiden que se evapore.

Un problema que se descarta, como también el de las mezclas en el momento de la combustión, ya que el hidrógeno se quema de manera más rápida que otros hidrocarburos, además de hacerlo de manera óptima, incluso con mezclas pobres.

Que Toyota siga haciendo tests con esta tecnología, es un punto a favor para no perderla de vista y, por supuesto, para no confundirla más con la de pila de combustible de hidrógeno.

Sobre la firma
Ruben Leal
Rubén Leal

Redactor de Híbridos y Eléctricos, cubriendo toda la actualidad del sector de los vehículos eléctricos y la movilidad sostenible. Licenciado en Comunicación Audiovisual y Ciencias de la Información por la Universidad de Málaga. Cursó el máster Comunicación y Periodismo Deportivo en la Universidad Europea. Además, ha trabajado en medios de comunicación del motor como Autopista, Motor1 y SoyMotor.