Recargar en los Supercharger de Tesla será más caro a partir de ahora: así cambia su política

Tesla ha cambiado la política de facturación en su red de Supercargadores, y a partir de ahora también tendrán en cuenta el gasto de electricidad de sistemas como el climatizador o el de calentamiento de la batería.

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14/01/2020 10:46
Actualizado a 27/01/2020 11:52

Durante un buen tiempo, la recarga gratuita e ilimitada de Tesla fue poco menos que el Santo Grial de la compañía estadounidense que dirige Elon Musk. Sin embargo, atrás quedaron esos tiempos y ahora Tesla ha vuelto a cambiar su política de facturación con no demasiado buenas noticias para los clientes de la marca. Y es que, a partir de ahora, enchufar un coche eléctrico de Tesla en uno de los Supercargadores de la compañía será más caro que antes.

Tesla ha actualizado su política de facturación de los Superchargers, de manera que a partir de ahora se tendrá en cuenta toda la electricidad que use el coche mientras permanece enchufado, incluyendo la energía consumida por la calefacción, el aire acondicionado o el sistema de calentamiento de la batería. Hasta ahora, Tesla solamente cobraba por los kWh suministrados a la batería principal, pero evidentemente la compañía corría también con los costes del resto de energía consumida (si los había).

Tesla dice que el nuevo método debería «reflejar con mayor precisión la cantidad de energía suministrada» al cliente y el costo incurrido por la compañía. Según Tesla, en las regiones con climas extremos (donde se consume más energía para calentar o enfriar el coche), podrían experimentarse diferencias de entre 10 y 25 kWh durante una sesión de carga. En España, esto podría suponer como mínimo un sobrecoste de unos 3 euros por cada recarga rápida en la red nacional de Supercargadores Tesla.

Como era lógico y previsible, la política de recargas gratuitas ha ido mutando en un servicio de pago conforme la red de cargadores y el número de clientes ha ido creciendo. Lo que en su día se ofrecía gratis (o al menos iba incluido en el precio del coche) como un reclamo para los clientes, tenía los días contados desde sus inicios ya que era algo económicamente insostenible.

El hecho de no tener que pagar por las recargas permitió a Tesla tomarse un tiempo para desarrollar con calma un sistema de pago para los Supercargadores. Ahora, fabricando más coches que nunca y con dos Gigafactorías nuevas (la de China ya en funcionamiento, y la de Alemania con la construcción confirmada), se hace necesario financiar una red de carga en continuo crecimiento que este año vivirá una gigantesca expansión, con los Supercargadores V3 de tercera generación incluidos.

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