BYD está avanzando significativamente en Europa. La compañía, en sus pocos años presentes en el Viejo Continente, se ha hecho un importante hueco en este territorio, gracias a sus coches eléctricos. Entre sus principales virtudes están: un diseño muy atractivo, un interior bien rematado y muy habitable, unas especificaciones técnicas a la altura y un precio relativamente accesible para la mayoría. A esto se une la nueva fábrica que inaugurará muy pronto en Hungría.
La vicepresidenta ejecutiva de BYD, Stella Li, es conocida popularmente por ser bastante clara en sus afirmaciones. Recientemente se ha podido saber gracias a esto que su objetivo, entre otras cosas, es ser la marca número uno del mundo, superando incluso a Toyota. Ahora, la responsable ha vuelto a la carga en una nueva entrevista para el medio ZDF donde ha hecho especial hincapié en lo injusto de los aranceles europeos sobre los coches eléctricos chinos.

Stella Li no ve justo el movimiento de Europa en contra de China
Como bien es conocido, la Unión Europea impuso oficialmente unos aranceles de hasta el 35% a la importación de coches eléctricos chinos. Su imposición se basaba según la colaboración que la marca hubiese realizado para la investigaicón de posibles subsidios hacia estas por parte del gobierno chino. La más perjudicada aquí fue SAIC, a la que se le aplicó el mayor porcentaje. BYD, por su parte, recibió un 17% de impuestos adicionales.
Ante esto, Li estalló: “Se acusa al gobierno de la República Popular de dar una ventaja injusta a los fabricantes mediante elevados subsidios. Esa es una afirmación injusta. No existe una sola prueba de que alguna empresa china reciba un subsidio especial. Las subvenciones están dirigidas a la industria en su conjunto. Cualquiera que invierta en la producción en China puede beneficiarse de ellos, incluido Volkswagen o BMW. No se puede decir que, sólo porque una empresa china sea competitiva, debe haber recibido un subsidio. Eso no es justo”.
Pero el comentario de la directiva no quedó ahí: “Los coches eléctricos tienen tanto éxito en China porque el gobierno lleva 20 años persiguiendo este objetivo: el futuro pertenece al coche eléctrico. Lo implementaron en sus planes quinquenales y nunca flaquearon. En Europa se ve lo contrario”.

Stella Li, en este último comentario, hacía referencia a la posible ‘marcha atrás’ por parte del gobierno de la Unión Europea ante las políticas verdes en la región. Achaca que esto permitirá a las marcas seguir fabricando y desarrollando motores de combustión. “Esto confunde a los clientes y duplica los costes para los fabricantes”, apuntó.
Del mismo modo, también ve un futuro para BYD más centrado en el mercado europeo. Actualmente están culminando su nueva fábrica de Hungría, pero también están preparando la segunda, que se asentará en Turquía. Según los últimos rumores, también se supo que estaban barajando una tercera planta en Alemania, a lo que Li respondió: “Al igual que otras empresas, estamos abiertos a invertir en otros lugares. ¿En Alemania? No lo sabemos”.
Recordemos que BYD acaba de lanzar en Europa el que esperan que sea su modelo estrella, el Dolphin Surf, el cual parte en España desde 19.990 euros sin contar ayudas o descuentos. Sobre este, Li aseguró: “No es un coche barato, pero es accesible. Es un coche eléctrico para todos”.