Esta Q.ik Barcino 2025 que ha estado con nosotros un par de semanas no es una bicicleta eléctrica plegable como las demás. La hemos probado a fondo y, la verdad, es que nos ha dejado un grato ‘sabor de boca’.

Estamos viendo cómo a los modelos urbanos les está costando ‘arrancar’ en nuestro país. Parece que el pensamiento generalizado es ofrecer modelos de muy bajo coste para atraer a los potenciales usuarios. Y es que creemos que la única manera de desplazarnos por la ciudad es hacerlo en modelos muy económicos para poder invertir dinero en otras bicicletas para el ocio.

Sin embargo, tampoco está siendo la solución. ¿Y si se ofrecieran bicicletas urbanas ‘premium’ a precios razonables? Parece que ha sido lo que los creadores de Q.ik pensaron en su momento...
Q.ik Barcino: bicicleta de carbono con suspensión trasera

Si a alguien le dijéramos que una bicicleta es de fibra de carbono, que tiene un sistema de suspensión trasera y frenos de disco hidráulicos, y no le contáramos que es plegable, inmediatamente creería que es una exclusiva bicicleta de montaña ¡Pues no! Hablamos de una bicicleta plegable para la ciudad.

La Barcino posee un cuadro de fibra de carbono con unos acabados muy cuidados. Evidentemente, el fin es dotar a la Barcino de un peso muy ajustado. Y es que hemos verificado 18 kg en una bicicleta con motor y suspensión trasera. No está nada mal. Por cierto, en la web hablan de un peso de 16,5 kg, pero también hay que decir que ese peso es con la batería pequeña de 252 Wh (7 Ah), y no con la nueva de 374,4 Wh (10,4 Ah).

Esto hace que el manejo sea muy natural. Pero no hablamos solo de moverla en parado para almacenarla o transportarla, por ejemplo, en un vehículo: cuando nos movemos con ella nos da la sensación de ir en una bicicleta sin motor. Es más, revisando modelos plegables sin motor (en acero o aluminio) de otras marcas, los pesos rondan los 14 o 15 kg. Las diferencias con nuestra Barcino son despreciables. Pero si nos fijamos en modelos de bicicletas eléctricas plegables en, por ejemplo, aluminio, el peso se va entre 3 y 5 kg más. Y no llevan suspensión.

Por otro lado, el sistema de suspensión trasero es de agradecer. No está ahí para tragar con desniveles como los que nos encontramos en el campo. Es un sistema cuya misión es la de aportar comodidad. Es un poco ‘rebotón’ (la simplicidad de su esquema hace que no tenga mucha progresividad) pero filtra las irregularidades impidiendo que lleguen a nuestro trasero.

El pequeño amortiguador, de aire, tiene una válvula para meter más o menos presión y regular de esa forma el poder de compresión. Delante, la Barcino tiene una horquilla rígida. No hemos echado en falta ahí delante la suspensión ya que, como decimos, esta bicicleta se diseñó para la ciudad y las irregularidades que nos encontramos son perfectamente filtradas por el neumático delantero.

El sistema de plegado es muy cómodo, el habitual en las bicicletas plegables. Y la verdad es que ocupa poco espacio (85x52x70 cms). lo que hace que su almacenaje no suponga ningún inconveniente.

Además, como ya hemos comentado, el peso tan ajustado hace que manejarla en parado sea muy fácil, al alcance de personas de cualquier condición física (al menos, así lo creemos).
Un motor voluntarioso que no necesita marchas

El pequeño motor ubicado en el buje de la rueda trasera (Shengyi de 250 W) tiene un buen empuje: nos hemos movido en un entorno con desniveles no excesivamente acusados y el modo de menor aporte de potencia ha sido suficiente en la mayoría de los casos.

Tiene un sensor de par en el pedalier, lo que hace que el aporte sea bastante natural y en consonancia con la potencia desplegada por nuestras piernas. Es cierto, como pasa con la mayoría de motores de buje, que hay un pequeño retardo en la entrega de potencia. Nada alarmante. Por otra parte, hemos apreciado que el motor nos entrega potencia más allá de los 25 km/h (casi hasta los 30 km/h). No nos vamos a quejar de eso ya que nos ha venido muy bien para desplazarnos con celeridad.

Esta Barcino nos ha venido con la opción de la transmisión monomarcha con correa dentada (de carbono firmada por Michelin) y nos ha encantado. Primero porque, en un modelo de estas características, olvidarnos de ir cambiando de marcha es una maravilla: nos hemos concentrado en la conducción, algo que viene muy bien en ciudad donde hay que prestar mucha atención.

Y, segundo, porque el mantenimiento es mínimo: no hay que andar ajustando cambios ni engrasando cadenas. Con la Q.ik Barcino sólo tenemos que ‘arrancar’ y rodar. Además, el silencio de funcionamiento es total: la transmisión es muy silenciosa. El sobrecoste de la transmisión por correa, con respecto al modelo con marchas, es de 100 euros: creemos que merece la pena.

Eso sí, un sistema monomarcha de transmisión es muy cómodo pero, cuando aparecen fuertes desniveles, nos obliga a ‘tirar’ constantemente de modos de mayor potencia. Eso no es un problema ya que disponemos de hasta cinco, por lo que potencia tenemos a raudales. El único ‘pero’ es que eso supone un mayor consumo de batería.

La batería que se ha instalado (en la tija del sillín) es la nueva para 2025 de 374,4 Wh (10,4 Ah). Tiene una pequeña toma de carga muy accesible bajo el propio sillín, pudiendo ser recargada con ella instalada en la bicicleta o sacando la tija y llevándola a nuestra casa. El cierre lleva una cerradura para que no nos la puedan robar.

La autonomía es más que suficiente: en ciudad, para desplazarnos al trabajo, ir de compras, quedar con amigos a tomar un café…. En definitiva, hacer unos 10-15 km (que ya son muchos) ha supuesto ver cómo en el display (muy fácil de visualizar, incluso con la luz del sol incidiendo directamente) ha bajado una barrita de la batería (de cuatro que tiene).

Opcionalmente podemos instalar una batería de 504 Wh. Desde nuestra perspectiva, no la creemos necesaria. En la web la marca se habla de una autonomía, para la de 374,4 Wh, de unos 60 Km. En condiciones normales, donde vamos a jugar con los modos de potencia para sortear desniveles y según nuestra experiencia extraída, la autonomía real va a andar rondando los 40-45 km. ¡Suficientes para la ciudad!

Un comportamiento muy seguro
Lo que más nos ha gustado de esta Q.ik Barcino ha sido su noble comportamiento. Evidentemente, las reacciones son las esperables de una bicicleta que tiene unas pequeñas ruedas de 20 pulgadas: es nerviosa. Eso significa, por un lado, que tenemos unas vivas reacciones, con una gran inmediatez en la dirección a nuestras insinuaciones. Si a eso sumamos que no es difícil ver los 29-30 km/h en nuestro display, en ocasiones parece que vamos casi en una bicicleta de carreras. ¡Esta Barcino es muy divertida!

¿Hay que frenar? No hay problema: el set de frenos de disco hidráulicos (Shimano) es excepcional, con mucha potencia pero un gran tacto que nos ha permitido dosificarlos con facilidad.

La suspensión trasera ha hecho que rodar por algún caminito (como puede haber en parques) haya sido muy cómodo. La verdad es que nos ha gustado lo de la suspensión porque hemos llegado a nuestro destino muy descansados.

Y, ¿no hay defectos?
No hay nada perfecto en esta vida y, lógicamente, en nuestra Barcino hemos apreciado algún defecto. Bueno, más bien alguna ‘laguna’.

Creemos que es un producto muy bien hecho, casi redondo. No se aprecian defectos de ‘inexperiencia’ (esta marca barcelonesa data de 2024 y fue presentada internacionalmente en la última edición del Eurobike) es decir, que estamos ante un cuadro impecablemente realizado, donde todo encaja a la perfección. El sistema de plegado es muy consistente, no hay holguras, no hay crujidos al circular (ni al pasar por baches). Parece que estamos ante una bicicleta con muchos años de evolución a sus espaldas. ¡Bravo por Q.ik!

El motor es suficientemente potente y la batería, más que de sobra. Frena bien, traga con las irregularidades como pocas bicicletas eléctricas plegables. Se maneja muy bien gracias a su bajo peso y se pliega con facilidad. Entonces, ¿dónde están las ‘lagunas’?

Pues, la verdad, es que casi no existen. Por sacar algún 'pero', queremos mencionar la manera de entregar potencia del motor: nos ha gustado que mantuviera más de 25 km/h, pero, si nos hemos hecho con un modelo ‘premium’, preferiríamos una mejor precisión en este sentido, que tuviera menos retardo a la hora de entregar la potencia y que a los 25 km/h se cortara la entrega como bicicleta Pedelec que es. ‘Peccata minuta’.

A nuestro modo de ver, entendemos que los guardabarros son fundamentales , y más en un modelo urbano. Hablando con los responsables de la marca, nos comentaron que nuestra unidad no los llevaba pero que de serie vienen...¡genial! ¿Portabultos? En este caso, es opcional.

Nuestra bicicleta también venía sin luz trasera. El foco delantero es muy potente, no hay pegas. Pero creemos que debería haber estado complementado con uno trasero. Desde Q.ik nos comentan que de serie vendrá, aunque no será alimentado por la propia batería como el delantero.

Conclusión
¡Qué bien nos lo hemos pasado con la Barcino! Nos hemos movido con alegría: es potente, veloz, manejable y muy cómoda. Hemos tenido en nuestras manos varias bicicletas urbanas, de gran empaque y prestancia. Pero, en ciudad, nos han resultado algo sosas. Esta Barcino ha hecho que desplazarnos en un entorno, aparentemente aburrido, haya sido una grata experiencia.

La bicicleta destila mucha calidad, es bonita (seguro que en colores más llamativos es más bonita aún), cómoda, ligera, segura…. Y el precio es más que recomendable: piden por ella 2.350 euros (más los 100 euros de la correa). ¿Qué más se puede pedir? Según nos comentan desde Q.ik, tienen algunos modelos 2024 en stock, con cambio Shimano Tourney de 7 velocidades y la anterior batería de 252 Wh (7 Ah) por 1.995 euros.

Ficha técnica Q.ik Barcino 2025
- Cuadro: fibra de carbono
- Motor: Shengyi 250 W brushless en buje de rueda trasera. Sensor de par motor
- Batería: 374,4 Wh (10,4 Ah) en la tija del sillín. Opcionalmente de 504 Wh (14 Ah)
- Display: Naici KT-5 LCD
- Suspensión: trasera, monopivote con amortiguador de aire

- Frenos: de disco hidráulicos Shimano (discos de 160 mm)
- Ruedas: 20 pulgadas de aluminio
- Neumáticos: Schwalbe Road Cruiser 20x1.75

- Peso: 18 kg (verificado Híbridos y Eléctricos)
- Precio: desde 2.350 € (nuestra unidad de pruebas, con la transmisión monomarcha con correa, 2.450 €)
Más información en: Q.ik Barcino