Nuevo reglamento de baterías para Europa: los fabricantes se preparan para más obligaciones

La Unión Europea quiere aumentar la producción de baterías para vehículos eléctricos, pero desde un punto de vista que puede comprometer la no dependencia con respecto a China.

Europa quiere que sus baterías sean responsables con el medio ambiente.
Europa quiere que sus baterías sean responsables con el medio ambiente.
24/06/2025 10:30
Actualizado a 24/06/2025 10:30

Europa depende mucho de China en este momento. El mercado de coches eléctricos crece y con él la necesidad de baterías y sistemas eléctricos que, principalmente, provienen del extranjero. El Viejo Continente se ha propuesto liderar la transición energética global sin controlar la cadena de suministros necesaria para ello. Europa quiere fabricar sus propias baterías para así no tener que estar mirando constantemente a China y a sus múltiples cambios de opinión. El próximo mes de agosto entrará en vigor un nuevo Reglamento de Baterías que tiene como objetivo garantizar que estas se produzcan de forma ética y sostenible.

Un nuevo informe presentado por la organización ambiental Transport & Environment (T&E) analiza la implementación de los requisitos implantados por la Unión Europea en las cadenas de suministro de baterías por parte de los fabricantes de automóviles. El nuevo mandato exige a las empresas identificar, mitigar y divulgar los riesgos relacionados con los derechos humanos, el medio ambiente y el cambio climático. Según el informe, basado en datos y estudios públicos, muchos fabricantes de automóviles ya están avanzando en su preparación.

Batería Mercedes
Fabricantes como Mercedes y BMW demuestran estar comprometidos con las nuevas exigencias de la UE.

Más requisitos medioambientales y sociales para las baterías ‘made in Europe’

La mayoría de los fabricantes han comenzado a implementar políticas de cadena de suministro y medidas de transparencia. Si bien no se han abordado todos los riesgos por completo, la mayoría de las empresas cuentan con evaluaciones iniciales de riesgos. Según los autores del estudio, ahora es crucial que todos los riesgos relevantes a lo largo de toda la cadena de suministro estén cubiertos exhaustivamente. También se están logrando avances en la reducción de los riesgos ambientales. El aumento en la notificación de emisiones de gases de efecto invernadero es particularmente notable, ya que muchos fabricantes ya divulgan la totalidad de sus emisiones.

Un panorama similar se presenta en cuanto a la trazabilidad de los componentes. La mayoría de los fabricantes de automóviles han implementado sistemas para rastrear el origen y el procesamiento de los minerales de las baterías. Sin embargo, pocos rastrean la cadena de suministro hasta la mina. A pesar de este progreso, persisten lagunas. Si bien existen políticas generales contra la deforestación, solo una empresa se ha comprometido con un objetivo específico con plazos concretos. El uso del agua tampoco es lo suficientemente transparente. Las marcas divulgan su propio consumo, pero el de los proveedores sigue sin documentarse.

Mina Litio
La extracción de materiales como el litio suma grandes cantidades de emisiones contaminantes a la atmósfera.

La estrategia eléctrica europea no siempre ha tenido el calado y el efecto deseado. La venta de coches eléctricos sigue creciendo, aunque mucho más lentamente de lo esperado. Mientras, los fabricantes chinos siguen penetrando en el continente con una cuota de mercado cada vez mayor. Las soluciones energéticas europeas también se han puesto en tela de juicio tras la quiebra de la mayor apuesta continental; Northvolt. La empresa sueca de baterías ha cerrado todas sus operaciones al ser incapaz de hacer frente a la potente maquinaria china. España ha recibido grandes inversiones, chinas en su mayoría, para aumentar la producción de baterías en Europa.