Europa suma un nuevo nombre a la revolución eléctrica sobre dos ruedas. Balistron, una joven marca turca fundada por los hermanos Turan y Mert Güçlüer, ha irrumpido con fuerza en el panorama internacional al presentar una nueva generación de motos eléctricas que buscan redefinir la movilidad urbana y de media distancia.
Su propuesta combina ingeniería de precisión, diseño artístico y confort superior, bajo una premisa clara: demostrar que una moto eléctrica puede ser accesible, icónica y aspiracional al mismo tiempo. Los modelos debutan oficialmente coincidiendo con la feria EICMA de Milán, el gran escaparate mundial de la moto celebrado desde comienzos de noviembre de 2025.
Tecnología de alta gama a precios accesibles

Balistron llega con dos modelos principales: Balistron Le Sport TS16.12 y Balistron Le Cruiser TCR15.12, ambos equipados con motor eléctrico de 8 kW de potencia nominal (10 CV) y con picos máximos de 15,4 kW (21 CV). La velocidad máxima que alcanzan es de 130 kilómetros/hora. Es decir, que son consideradas motos equivalentes de las de combustión de 125 centímetros cúbicos, y se pueden conducir con el carné de moto A1 o con un permiso de conducir B (coche) con al menos tres años de antigüedad.
La Balistron Le Sport TS16.12 destaca por su espíritu dinámico y deportivo, con hasta 230 kilómetros de autonomía gracias a la batería de 11,52 kWh, y con un equipamiento que sorprende incluso en motos de mayor precio: ABS + TCS, control de crucero, monitor de presión de neumáticos, puños y asiento calefactables, y cámara de seguridad frontal. Además, permite personalizar gráficos y colores, apostando por un público joven y creativo.
Por su parte, la Balistron Le Cruiser TCR15.12 combina una estética clásica con la tecnología eléctrica moderna, ofreciendo una autonomía de 212 kilómetros y carga rápida en solo 1,8 horas gracias al mismo paquete de baterías. Su suspensión ajustable y la conectividad Bluetooth refuerzan su enfoque en el confort y la experiencia prémium.
Estrategia de precios competitiva

Con precios que oscilan entre 7.500 y 11.800 euros, Balistron adopta una estrategia “prémium accesible”, posicionándose entre los scooters eléctricos urbanos de gama alta y las motos deportivas de media cilindrada.
El objetivo, según la marca, es democratizar la movilidad eléctrica de alto rendimiento: ofrecer calidad, diseño y seguridad sin alcanzar los precios prohibitivos de otros fabricantes europeos o asiáticos.
Expansión europea y visión de futuro
Balistron ha iniciado su implantación con un almacén central de repuestos en Estambul y prevé abrir una línea de ensamblaje en Turquía junto a un centro logístico en Europa en los próximos 18 meses. Con ello, los tiempos de entrega se reducirán de tres días a tan solo uno, mejorando la atención posventa.

En esta primera fase, la marca centrará sus esfuerzos en Francia, España e Italia, considerados mercados clave por su fuerte cultura motociclista y la creciente demanda de vehículos eléctricos. Para 2026, la gama se ampliará con quads eléctricos (ATV) y, más adelante, con sistemas de propulsión marina y drones, reflejando la ambición de la firma por crear un ecosistema completo de movilidad sostenible.
De cara a 2030, Balistron aspira a consolidarse como referente europeo en diseño, confianza e innovación, uniendo a jóvenes motoristas y conductores veteranos bajo una misma filosofía: disfrutar de la conducción sin renunciar a la sostenibilidad.
“Vemos a Balistron como un puente entre generaciones. Diseñamos para las personas, las carreteras y un futuro más responsable con el planeta.”, explica Mert Güçlüer, cofundador de la compañía.