Jordi Cruz es uno de los cocineros más conocidos de toda España. Su participación en Masterchef le ha llevado a los salones de los hogares del país, pero también está al frente del restaurante ABaC en Barcelona con tres estrellas Michelin, además de otros tres restaurantes en la ciudad condal. Moverse entre ellos es algo que hace por la vía eléctrica, pero no sobre cuatro ruedas, si no sobre dos.
El cocinero tiene una Zero S desde hace tres años y en una entrevista publicada por la marca da su opinión sobre la electromovilidad, las motos eléctricas y algunas dudas habituales que hay sobre ellas.

Lo primero que aborda es cómo enfrenta él moverse por una gran ciudad como es Barcelona y en un día a día en el que tiene que hacer muchos desplazamientos: “Para mí moverme es una de las partes difíciles de todo lo que hago. Antes perdía mucho tiempo moviéndome y me gusta hacerlo fácil, hacerlo ameno para que no me quite energía o me canse. En Barcelona tengo un coche pequeño y una gran moto que me lo hacen muy ameno y rápido y sencillo; los dos eléctricos, claro”.
“Nunca he tenido la sensación de quedarme sin batería”
Esto, inevitablemente, lleva a hablar de uno de los temas que más dudas generan en los conductores: la autonomía. Es especialmente acusado en las motocicletas, porque por sus características tienen que montar baterías de menor capacidad que las de un automóvil.
Cruz explica: “Yo he tenido más miedo de quedarme sin gasolina que quedarme sin batería, francamente, porque gracias a Dios tengo bastante autonomía. La carga me dura muchos días porque tampoco hago muchísimos kilómetros; me muevo por toda Barcelona. Voy a mis cuatro restaurantes, pero no son 200 kilómetros y la carga me dura muchos días”.
Además, destaca la facilidad que tiene para cargar: “En casa es que llego, enchufo y en dos o tres horas la tengo a tope. En el restaurante también tengo puntos de carga rápida. Es que no me cuesta nada. Es que nunca he tenido la sensación de quedarme sin batería. Nunca”.
Sensaciones diferentes
Un aspecto sobre el que hay consenso es que los vehículos eléctricos, ya sean coches o motos, son silenciosos, pero Cruz no está de acuerdo: “¿Sabes lo que pasa? Que dicen que no hace ruido. Sí hace ruido, hace el suyo. Tiene una música distinta, tiene un sonido distinto. Me recuerda las motos de las películas de ‘La Guerra de las Galaxias’, de Star Wars, que silbaban”.
Añade que “sí tiene su ruido. No es estridente. Simplemente carece del ‘brooom, brooom’. Yo estoy encantado por el ruido que hace y se escucha al acelerar. Es un sonido que me parece agradable, que me parece de potencia sin estridencias”.
Es consciente de que subirse a una moto eléctrica por primera vez es algo que rompe los esquemas de quien está acostumbrado a una de gasolina. Admite que cuando se subió a la Zero lo que le sorprendió fue “sobre todo la potencia”. Explica que “es una moto que te sientes que vas encima de una gran moto, pero que tiene otro tipo de agilidad. Es otra historia. Las sensaciones… Es rápida, potente. Pero otro tipo de potencia; más silenciosa. No he echado en falta el ruido ni el olor a gasolina. No sé por qué”.
Por último, para aquellos motoristas que tienen un modelo de combustión y no saben si dar el salto a uno de cero emisiones, compara la situación con la que se experimentó con la llegada de la telefonía móvil: “Bueno, es como aquel que no quiso comprarse un teléfono móvil en su momento. Tú podías vivir sin él, está bien. Me gusta la gente retro. Me gusta la gente que no le gustan las modernidades. Entiendo que la gente se aferre al pasado, pero inevitablemente tenemos que ir hacia el futuro”.
“Y el futuro pasa por una movilidad eléctrica y sostenible. Es así. Es un hecho. Es algo que tardará más o tardará menos. Pero dentro de cuatro días los coches ya no funcionaran con gasolina y las motos tampoco. O sea que chico, ponte al día”, concluye.

