Hablar de Stark Futureses hacerlo de, posiblemente, la marca más de moda de los últimos tiempos en el 'sector eléctrico'. Ahora acaba de lanzar una moto eléctrica que promete ser una 'bomba': se trata del modelo de supermotard Stark Varg SM. Y es que posicionar, como ya ha hecho, una moto de campo matriculable, como es la Varg EX, entre las motocicletas eléctricas más vendidas es complicado, y ahí es donde radica el gran éxito de Stark.

Como no podía ser de otra forma, esta Varg SM está basada en los modelos de cross (SX) y Enduro (EX), aunque con las pertinentes modificaciones para convertir unas motos de campo en una de carretera 'pura y dura'.
Un motor que es ya un icono
El motor de esta Varg SM es el montado en los modelos de campo: una impresionante unidad refrigerada por líquido que puede llegar a entregar hasta 80 CV, configurable desde la propia App de la marca. Una pasada. La carcasa que lo recubre, al igual que en los otros modelos, está realizada en fibra de carbono, para aligerar peso.

Para una conducción segura en carretera y que no tengamos problemas de agarre, además del consabido control de tracción que incluye, este motor ha reducido un poco el par motor: de los 1.018 Nm del modelo de Enduro o los 978 Nm del modelo de cross pasamos en esta SM a 914 Nm. Para maniobrar con ella en parado, se instala una marcha atrás, tremendamente práctica.

La batería sí que es la misma de 7,2 kWh que en los otros dos modelos y que, según Stark, puede llegar a aportar hasta 118 km en ciclo mixto mientras que por autopista esta autonomía se reduce hasta los 79 km.
Una parte ciclo adaptada al asfalto
La carrocería ha sufrido ligeras modificaciones para diferenciar a esta SM de las otras dos Varg: hay sutiles cambios en el diseño de los plásticos y el guardabarros delantero se recorta un poco para mejorar la penetración aerodinámica.

El recorrido de las suspensiones se ha recortado: son de la firma KYB y ahora ofrece 290 mm delante (310 en el modelo MX y 300 en el EX) y 303 mm detrás (se mantiene con respecto a las otras dos). Con ello se consigue que, en un comportamiento 'onroad' estas suspensiones sean más consistentes, aplomando más a la SM en curvas. Por otro lado, el centro de gravedad es algo más bajo que en los modelos campestres, lo que redunda en ese buen comportamiento en tramos revirados.

Las ruedas son, lógicamente, distintas: ahora tienen medidas de moto de carretera (17'' de diámetro en ambos ejes), calzando neumáticos deportivos en anchuras de 110 mm delante y 140 detrás. Los frenos, por su parte, también se han adaptado, con más mordiente: en la rueda delantera nos encontramos un imponente disco de 320 mm mordido por una pinza de cuatro pistones. Detrás se mantiene la unidad de 220 mm y la pinza de un solo pistón.

Por cierto, incopora un sistema de frenada regenerativa, lo que ayuda también a conseguir buenos registros a la hora de 'echar el ancla'. Además, su actuación es personalizable desde la App.

Por cierto, el peso se ha resentido un poco, algo lógico al presentar unos componentes algo sobredimensionados: la nueva SM se va a los 124 kg por 120 del modelo EX de Enduro. Aún así, hablamos de una relación peso-potencia extraordinaria: cada caballo de potencia mueve 1,55 kg de moto.

El móvil militar sigue estando entre su equipamiento
Una de las características de las Varg es que se suministran con un móvil Arkenstone de 'calidad militar' que hace las funciones de tablero de instrumentos. Con él, el cual trae consigo una tarjeta SIM, podemos llevar un registro de nuestras salidas, realizar modificaciones en la curva de potencia de la moto, actualizar el software de la misma... en definitiva, un amplio abanico de opciones.

Además, esta Varg SM está muy protegida gracias al bloqueo (mecánico) de llave en el manillar y al digital integrado en la propia aplicación. Por cierto, posee seguimiento por GPS integrado en el sistema.

La nueva Varg SM se vende desde ya por 12.990 euros (mismo precio que la EX de Enduro), una cifra muy ajustada viendo lo que se encuentra en el sector, que no es mucho. Y más si tenemos en cuenta, como dice la propia marca, que es la Supermotard más potente del mundo. Ahí es nada. Más información en: Stark Varg SM