Se considera que el coche eléctrico es el verdadero arma para reducir las emisiones del parque de vehículos, pero en realidad no lo es. Si bien durante su ciclo de vida útil un coche eléctrico no presenta emisiones contaminantes -depende de la procedencia de la energía de la carga- su volumen de ventas todavía no es lo suficientemente grande como para causar el impacto esperado en la contaminación. Sin embargo, Toyota sí lo está logrando con sus híbridos. Hoy por hoy son la opción preferida por cada vez más conductores tanto en España como en Europa. Los millones de Toyotas que circulan por Europa han conseguido reducir la huella de carbono del transporte. Su nuevo lanzamiento también lo hará.
El pasado 2 de junio se presentó en sociedad el nuevo Toyota Aygo X. El modelo más pequeño de la marca japonesa se ha actualizado mucho más de lo que a simple vista se puede apreciar. Sí, cambia su presentación. Nuevo frontal y nuevos detalles, para un tamaño ligeramente diferente. El nuevo Aygo X es sensiblemente más grande que su predecesor, ¿por qué?. Porque bajo el capó se esconde un motor completamente diferente. El Aygo X se desprende de su motor de combustión para caer en brazos de la hibridación más eficiente que jamás se haya montado en un Toyota.
Consumo homologado de 4 litros/100 km y 86 gramos de CO2/km
De hecho, el Aygo X es el coche sin enchufe con las emisiones de CO2 más bajas de todo el continente, a pesar de que comparte mecánica con su hermano mayor, el Toyota Yaris. Con los datos encima de la mesa vemos una estructura de sobra conocida. Consta de un motor atmosférico de cuatro cilindros y 1.5 litros que se acompaña de un motor eléctrico. El rendimiento combinado es de 116 caballos de potencia. Un notable incremento de 44 caballos con respecto al modelo saliente. Gracias a ello el Aygo X acelera mucho más deprisa. Tarda menos de 10 segundos en alcanzar los 100 km/h, cuando antes tardaba más de 15 en lograr la misma velocidad.
Por muy importantes y destacados que sean estos datos, hay uno que resulta demoledor; las emisiones de CO2. La quinta generación del sistema híbrido de Toyota destaca por sus bajos consumos y su mínima huella de carbono. Modelos como el Yaris se cuelan en todas las listas de los coches con menos consumo del mundo. El nuevo Aygo X marca unas emisiones de CO2 de tan sólo 86 gramos por kilómetro recorrido. Un Yaris Cross marca un registro mínimo de 101 gramos y un C-HR fija una marca de 105 gramos. Sólo los híbridos enchufables se sitúan por debajo de las emisiones homologadas por el Aygo X híbrido. El Toyota RAV4 PHEV oficializa tan sólo 22 gramos de CO2 por kilómetro, aunque ese dato se logra sólo con el apoyo de la batería de 75 kilómetros de autonomía eléctrica.
Toyota demuestra una vez más que el camino a seguir para reducir las emisiones contaminantes pasa por la venta masiva de vehículos híbridos. Las normativas europeas son cada vez más estrictas. Los fabricantes tienen que ajustarse a límites cada vez más apretados y son pocas las compañías que logran escapar a las sanciones. El nuevo Toyota Aygo X estará disponible a finales de este mismo año. Por el momento no se han comunicado sus precios, pero se espera que se convierta en el híbrido más barato del país. Su precio de salida podría situarse por debajo de los 18.000 euros sin descuentos o promociones.