La electrificación avanza a gran velocidad en Europa, China y Estados Unidos, pero Japón (cuna de gigantes como Toyota, Honda y Nissan) parece quedarse rezagado. El dato habla por sí solo: Toyota, incluyendo Lexus, vendió apenas 18 vehículos 100% eléctricos en su mercado local durante agosto de 2025.
La cifra contrasta con los más de 17.000 coches eléctricos que la compañía colocó en el resto del mundo en el mismo mes y revela un problema estructural en la transición japonesa hacia la movilidad eléctrica.
Toyota avanza fuera, se frena en casa

Entre enero y agosto de 2025, Toyota y Lexus han vendido 117.031 vehículos eléctricos a nivel global, lo que los pone en camino de superar las 140.000 unidades alcanzadas en todo 2024. En mercados como Europa y China, sus modelos eléctricos comienzan a consolidarse.
En Japón, sin embargo, la historia es distinta: apenas 469 coches eléctricos vendidos en los primeros ocho meses de la temporada, muy por debajo de las 2.038 unidades cero emisiones que se lograron durante todo 2024.
Mientras tanto, el híbrido sigue siendo el rey. Toyota ha comercializado más de 603.600 coches híbridos en lo que va del año en Japón, un incremento cercano al 10%. A nivel internacional, sus modelos híbridos suman más de 2,3 millones de ventas (+14%).
¿Por qué Japón no despega en eléctricos?

Según analistas de BloombergNEF, los vehículos eléctricos representarán solo un 3,4% de las matriculaciones nuevas en Japón en 2025, frente a cifras mucho más altas en Europa (20-25%) o China (superior al 30%).
Las razones son múltiples:
- Infraestructura de carga insuficiente, especialmente fuera de áreas urbanas.
- Fuerte arraigo del híbrido, donde Toyota es líder absoluto.
- Subsidios limitados y dispersos, que no alcanzan para competir con el precio de los modelos a combustión.
- Oferta reducida de modelos eléctricos adaptados a las necesidades locales.
Paradójicamente, Japón importa todo su petróleo, lo que haría lógico un mayor impulso a la electrificación como estrategia de independencia energética.
BYD y Honda marcan el rumbo
Incluso BYD, líder mundial en eléctricos, enfrenta dificultades en Japón: desde su desembarco en 2023 ha vendido apenas 5.300 vehículos hasta junio de 2025. Para dinamizar el mercado, la marca china lanzó descuentos de hasta 5.530 euros al cambio de divisa, que sumados a las ayudas locales pueden reducir los precios hasta en un 50%.
La ofensiva se concentra en el segmento de los kei cars eléctricos, vehículos urbanos compactos que dominan el mercado nipón. BYD prepara un modelo para competir directamente con el Nissan Sakura, líder local, y con el recién lanzado Honda N-ONE e, disponible desde septiembre por 15.570 euros.
¿Y el futuro de Toyota?
La baja adopción de eléctricos en su propio país representa un reto estratégico para Toyota. Aunque lidera la tecnología híbrida, el mercado global se inclina hacia el 100% eléctrico. Japón podría convertirse en su talón de Aquiles si no acelera en este terreno.
El caso muestra un contraste llamativo: mientras Europa subvenciona masivamente la compra de eléctricos y China multiplica la oferta, Japón se aferra al híbrido. La pregunta es cuánto tiempo más podrá sostenerse esa estrategia en un mercado cada vez más electrificado.
Conclusión
Los 18 coches eléctricos vendidos por Toyota en Japón en agosto no son solo una cifra anecdótica, sino un reflejo del rezago del país frente a la transición global. Con BYD y Honda apostando por los kei cars eléctricos, la presión sobre Toyota podría convertirse en la chispa que obligue al gigante japonés a buscar soluciones rápidas en su propia casa.