No es ningún secreto que China manda y domina el mercado automovilístico internacional. Todos los fabricantes, desde locales a extranjeros, tratan de hacerse con una cuota de mercado en el vasto imperio chino. El pasado mes de mayo Hyundai presentó al mundo su nuevo SUV eléctrico destinado para China. Un modelo que ha resultado ser tan bueno e interesante que Hyundai se está planteando hacerlo a escala global. No sería la primera vez que ocurre. Anteriormente había pasado con el Hyundai Inster, bautizado como Casper en Corea.
El Hyundai Elexio es el primer coche eléctrico creado por la empresa conjunta formada por Hyundai y BAIC, un gran fabricante chino. El Gobierno de Xi Jinping impone a todas las marcas extranjeras buscar socios locales con los que producir sus coches, a excepción de Tesla que juega por su cuenta. El Elexio está a punto de llegar a los concesionarios. Se estima que las primeras unidades se entregarán en las próximas semanas. Ahora la duda es si más adelante podría llegar a otros mercados dadas las buenas expectativas.

Muchas posibilidades de abrirse al extranjero
Conocido como el Hyundai IONIQ 5 de China, el nuevo SUV eléctrico de la marca coreana está cargado de tecnología inteligente y funcional, incluyendo sistemas de carga rápida, funciones avanzadas y una autonomía de 700 kilómetros (ciclo CLTC). Durante sus pruebas de choque se ha demostrado que tiene la capacidad de resistir los más altos estándares de seguridad de cualquier región del mundo. Hyundai atribuye el mérito a las cinco capas de chapa de acero de ultra alta resistencia, conocidas como "Mano de Dios", que rodean el chasis.
Visto lo visto, y a falta de conocer los precios de venta, el director ejecutivo de Hyundai en Australia, Don Romano, abre la puerta a una posible expansión comercial para el Elexio. Así lo ha declarado durante una entrevista concedida a EV Central. “Está en evaluación” y ha añadido: “sin duda, es un coche prometedor”. A pesar de todo, podría haber algunos obstáculos que superar. El director australiano de Hyundai lo explica: “todavía tengo trabajo por hacer para asegurarme de que sea el vehículo adecuado, en el segmento adecuado, al precio adecuado para nuestro mercado. Y aún no he alcanzado ese nivel”.

La introducción en Australia todavía no está confirmada. La decisión definitiva se tomará en los próximos meses. La apertura comercial australiana queda muy lejos de la europea, pero sin duda podría demostrar que las joint-venture en China están funcionando. Cada vez son más los coches surgidos de la fusión de empresas que llaman la atención al mundo y acaban por conquistarlo. El ejemplo más claro y reciente es el de Mazda y Changan. Ambas compañías parecen haber encontrado la fórmula del éxito con sus últimos productos eléctricos: los Mazda6e y Mazda CX-6e.