Si hay alguien que puede saber bien cómo funciona la tecnología 100% eléctrica, ese es Michael Spencer, quien trabajó durante algunos años para Tesla en el departamento encargado de lograr una mayor autonomía para los vehículos de Elon Musk, así como en la implementación de supercargadores. Ya fuera de la compañía, el ex directivo ha creado una start-up enfocada a las motos eléctricas muy baratas.
La empresa se llama Zeno (que no Zero) y ya ha lanzado su primera montura 100% eléctrica, disponible en dos variantes, la Zeno Emara y la Zeno Emara Adv. Michael Spencer ve en esta moto una oportunidad de crecimiento única en el mercado, pues la ha creado para ser resistente, potente y barata, enfocada a los potenciales clientes de África e India.
Un moto eléctrica que puede con todo

Porque esos son los mercados a los que va dirigida inicialmente, ya que el fundador de Zeno llegó a la conclusión de que allí es donde “el plan maestro de Tesla sería más fácil de implementar”. Y en realidad es un laboratorio de pruebas como pocos, pues la red de carreteras y el uso que se hace de las motos requieren de vehículos que sean duros y resistentes.
Pero también es vital que funcionen mejor que las motos de combustión tradicionales, y además que sean más baratas sin que los compradores tengan que recurrir a incentivos a la compra. Y a juzgar por lo que anuncia Zeno, lo han conseguido, porque el precio de venta está entre los 890 y los 1.325 euros al cambio de divisa. Asumimos que sin la batería.
La batería es intercambiable y se vende por separado
Lo que se hace con el paquete de baterías es venderlo por separado, y se da la opción de recargarlo en el momento o reemplazarlo en las estaciones de intercambio que están poniendo en marcha, y que ya probaron en Kenia.
Estamos hablando de una moto eléctrica con un rendimiento equivalente a una montura de combustión de 150 centímetros cúbicos, y que puede lograr una autonomía real por batería de 100 kilómetros. Además, la variante tope de gama Zeno Emara Adv está preparada para cargar dos paquetes de baterías más a los lados.
Parece que el resultado es lo que estaba buscando Spencer allá por 2022 cuando abandonó Tesla, pues sabía “lo que funcionaba y lo que no” en la compañía liderada por Elon Musk. Además, ha pensado en todo, y asegura que las baterías se pueden utilizar para alimentar otros dispositivos electrónicos cuando no se necesita para la moto en ese momento.
Los resultados durante meses de pruebas iniciales, fueron que los usuarios de la Zeno Emara en Kenia lograron ahorrar hasta un 40% del gasto que tenían con una moto de gasolina, lo que se traduce en más ingresos.
No irá de farol, cuando lleva ya recaudados más de 12 millones de dólares de capital aportado por fondos de inversión como Lowercarbon Capital y Toyota Ventures, entre otros. Como sea, quedan algunos detalles por conocer y ver si realmente triunfa este modelo de negocio.