Bien dice el refrán que “a quien buen árbol se arrima buena sombra le cobija”. No hay mejor árbol que el Presidente de Estados Unidos. Elon Musk y Donald Trump se han convertido en inseparables, aunque pronto sus caminos se dividirán. El presidente de Tesla ha sido uno de los más íntimos colaboradores y uno de los mayores mecenas de Trump durante la campaña presidencial y su posterior inicio de mandato. Ahora, Musk saca provecho de esa asociación con un contrato multimillonario para la más ruinosa de sus empresas, The Boring Company. Una lluvia de millones en mitad del desierto y en Estados Unidos.
Si bien te puede gustar más o menos el personaje, nadie puede negar que Musk ha cambiado el mundo a través de sus empresas. Ha cambiado los pagos online con PayPal, los viajes al espacio con SpaceX y la forma en la que nos movemos con Tesla. Ha cosechado el éxito con todas sus empresas, pero hay una que se le resiste. La más desconocida de todas ellas. The Boring Company es, como su propio nombre indica, el trastero de ideas de Musk. Una empresa muy variopinta que desarrolla desde lanzallamas a tuneladoras. Es de hecho los túneles su principal objetivo.

The Boring Company firma un gran contrato en Dubái durante la visita presidencial
En alguna ocasión te hemos hablado de The Boring Company. Elon Musk siempre ha soñado con construir una red de túneles o carreteras bajo tierra. Una enorme infraestructura que conecta los puntos neurálgicos de las grandes ciudades mediante vehículos autónomos. Como no, Teslas. La idea parecía prometedora en su primera demostración pública en 2017, pero desde entonces sólo la ciudad de Las Vegas cuenta con un pequeño servicio de coches recorriendo sus entrañas. Ni son coches autónomos circulando a 200 km/h ni hablamos de una extensa red de cañerías bajo la ciudad. Los Model Y que operan circulan a un máximo de 50 km/h y siempre hay alguien tras el volante.
Con tales resultados no es de extrañar que The Boring Company no haya conseguido ningún contrato más en estos años, hasta ahora. La cercanía con Trump le ha servido a Musk para firmar grandes contratos en las últimas semanas. Tal y como informa The New York Times, durante la visita del presidente americano a los Emiratos Árabes Unidos, la autoridad de tránsito de Dubái ha firmado con la empresa de Musk un millonario acuerdo para construir un sistema de transporte subterráneo. Por el momento no han trascendido más detalles al respecto, pero está claro quién ha salido beneficiado con la visita presidencial. Musk se encontraba entre la comitiva.

Los negocios de The Boring Company no sólo crecen en el extranjero, también dentro de las fronteras de Estados Unidos. Las paradas tuneladoras de la compañía pronto empezarán a trabajar. La Agencia Federal del Ferrocarril ha contratado a la empresa de Elon Musk para colaborar y participar en la red nacional de trenes americana (Amtrak). Concretamente en la construcción de un túnel que conecte la capital, Washington, con las localidades de Virginia y Baltimore. La razón gubernamental para recurrir a la empresa de Musk es evitar que el presupuesto del proyecto se dispare. Sea por un motivo o por otro, la empresa menos rentable de Musk mira al futuro con optimismo. Los nuevos contratos suponen, además de una lluvia de millones, un fuerte empujón para expandir su presencia.