Es bien sabido por todo el mundo, tampoco lo esconden, que el Gobierno chino es muy celoso con su industria y sus marcas. Sus leyes obligan, salvo contadas excepciones, a crear asociaciones entre marcas locales e internacionales si estas últimas tienen intención de operar en el país. Durante más de 20 años esa ha sido la política que ha reinado en la industria automovilística. Una estrategia con la que China ha conseguido aprender de marcas europeas, japonesas y coreanas y así alcanzarlas e incluso superarlas. Ahora, el Gobierno chino quiere meter mano en una empresa local en la que Stellantis ha puesto mucha atención.
En la primavera del año pasado Stellantis y Leapmotor sellaron un gran acuerdo por el cual los europeos invirtieron 1.500 millones de euros. Un contrato con el que Stellantis podría acceder a la tecnología de Leapmotor además de hacerse con los derechos de venta de la marca china en el Viejo Continente. Apenas un año y medio después de la firma del contrato, Leapmotor se ha convertido en uno de los fabricantes que más está llamando la atención en ambas regiones. Sus primeros productos han dejado un gran sabor de boca y son muchos más los que pronto llegarán. La marca ya se plantea producir algunos de sus coches en España.
FAW Group está controlada por capital estatal chino
Leapmotor ha pasado de ser un actor secundario a un gran protagonista. Sus matriculaciones van en ascenso, al igual que la producción. La marca ya ha fabricado más de 1.000.000 de coches en su corta historia y todo hace pensar que el crecimiento se acelerará en los próximos meses y años. En los nueve primeros meses, Leapmotor ha comunicado un aumento de los beneficios del 97,3%. Es una de las marcas que más incremento ha experimentado. Esperan un beneficio neto de 5.000 millones de yuanes para el próximo año. En torno a los 607 millones de euros si aplicamos el cambio. Es más que probable que esa cifra sea mayor al cierre de 2026.
La atención de Leapmotor no solo es evidente en Europa, también en China. Según diversas fuentes locales, FAW Group está más que interesada en realizar una gran inversión en Leapmotor. Ahora mismo, Stellantis posee un 21,26% de la empresa, porcentaje que lo convierte en el mayor accionista privado. Zhu Jiangming y el equipo fundador controlan conjuntamente alrededor del 25,8% de las acciones mediante participaciones directas e indirectas, lo que les asegura el control real. FAW Group, según las ya mencionadas fuentes, querría introducirse en el accionariado con un 5% de la empresa, la mitad de lo que algunos rumores apuntaban hace meses.
FAW es la abreviatura de First Automobile Works. Está considerado como uno de los seis grandes grupos automovilísticos controlados por fuentes públicas junto a Dongfeng, SAIC, Changan, Chery y JAC. FAW se fundó en 1953 y si bien tiene numerosos acuerdos de colaboración con empresas extranjeras como Toyota, Volkswagen o Mazda, también posee algunas compañías propias como Hongqi y Bestune. FAW Group quiere con esta maniobra acelerar su estrategia eléctrica. Actualmente, solo el 10% de las ventas de FAW corresponden a vehículos enchufables (EV + PHEV). Una cifra muy inferior a la media del mercado chino.