“Las nuevas baterías ricas en manganeso o de tipo LMR, […] supondrán un punto de inflexión debido a su balance entre densidad de energía, capacidad de carga y eficiencia de coste”. Así de confiada se ha mostrado Mary Barra, la CEO de General Motors sobre la nueva tecnología de baterías baratas en la que trabaja su compañía, pero también otro gigante automovilístico como Ford.
Mary Barra ha realizado estas declaraciones durante la rueda de prensa para dar a conocer los resultados de General Motors en el segundo trimestre del año, en el que sus beneficios han caído un 32%, debido a unos gastos de 1.100 millones de dólares debidos a la política de aranceles a productos extranjeros de la Administración Trump.

Unas baterías baratas que ahorrarán mucho dinero respecto a las actuales
En unas declaraciones recogidas por InsideEVs, la CEO de General Motors, Mary Barra, se refiere a las futuras baterías de tipo LMR o ‘ricas en manganeso y litio’, que requieren menos níquel y cobalto que las actuales de tipo NCM o LFP y que, debido al coste de estos minerales -de los, además, China ya tiene el control sobre los principales yacimientos mundiales- resultarían más baratas de fabricar a gran escala.
También supondrían un punto de inflexión en cuanto a costes de fabricación y densidad energética, ya que podrán almacenar más de energía en el mismo tamaño que una batería actual.
La CEO de General Motors explica que, “debido a su reducido contenido en níquel y cobalto, creemos que el ahorro potencial al usar baterías de este tipo LMR será mayor incluso que al utilizar las actuales baterías de tipo LFP”.
A cambio, estas baterías de tipo LMR incluyen hasta “un 60 ó 70% de manganeso”, un elemento que General Motors señala que es “muy abundante en nuestro planeta y con tarifas significativamente más baratas [que el níquel y el cobalto]”.
Un material que, además, “puede ser refinado y procesado en Estados Unidos”. Un hecho clave para que, en un futuro próximo Occidente pueda producir baterías baratas sin caer en los tentáculos de la industria de China, actual dominadora del mercado.

Tanto es asi que si antaño General Motors ya había manifestado que las nuevas baterías en las que está investigando -y también Ford- tendrían un coste similar de producción a las de tipo LFP; ahora creen que “el ahorro de costes será mayor”, aunque no han sabido cuantificarlo con exactitud.
Aunque Mary Barra no lo comentó en sus declaraciones, General Motors plantea comenzar a fabricar estas nuevas baterías, que está desarrollando junto con su socio LG; a finales de 2027. Y, a lo largo de 2028, lanzarlas en sus SUV y pick ups dado que, con un menor tamaño y una densidad energética hasta un 33% mayor que las actuales, se espera que ofrezcan hasta 400 millas o 634 kilómetros de autonomía.
Por su parte, Ford también busca lanzar estas nuevas baterías “antes de que acabe la década” señala Charles Poon, el director de desarrollo eléctrico de la marca del óvalo. Poo espera que estas nuevas baterías baratas permitan a muchos nuevos clientes acceder al mercado de los coches eléctricos.