La ofensiva de los fabricantes chinos de automóviles eléctricos en Europa no da tregua. Tras el avance de marcas como BYD, Xpeng o Leapmotor, ahora es el turno de GAC (Guangzhou Automobile Group), que llega al Viejo Continente con ambiciones claras: vender más de 50.000 unidades anuales en 2027, multiplicando por diecisiete sus previsiones de 2025.
El anuncio se produjo en el marco del Salón del Automóvil de Múnich 2025, donde la firma presentó algunos de los modelos que conformarán su oferta inicial para Europa. Entre ellos destacan el GAC Aion UT, un compacto eléctrico de precio asequible, y el GAC Aion V, un SUV mediano que apunta al segmento familiar. La gama también incluirá el GAC Aion Y, un crossover 100% eléctrico, y el más exclusivo GAC Hyptec HT, un SUV cupé con aspiraciones prémium.
Crecimiento acelerado

Las cifras de GAC reflejan la magnitud de su plan. Este año espera vender apenas 3.000 unidades en Europa, pero para 2026 la meta ya sube a 15.000, y un año después superaría las 50.000. Aunque esa cantidad sigue lejos de las ventas que logra en su mercado de origen, donde en 2024 alcanzó los 2 millones de vehículos globales, y los 127.000 en mercados internacionales,, el salto supondría consolidar a Europa como uno de sus destinos clave.
“Europa es un mercado estratégico”, subrayó Wei Haigang, presidente de GAC International, en declaraciones a CNBC. El directivo añadió que el continente será una de las cinco regiones prioritarias para el grupo en los próximos años.
La amenaza de los aranceles

Uno de los grandes obstáculos para la expansión de las marcas chinas en Europa son los aranceles a la importación. Para evitar que la política comercial frene sus ambiciones, GAC ya estudia la posibilidad de producir coches dentro de Europa. “Esperamos que los gobiernos chino y europeo puedan negociar para reducir los aranceles. Pero al mismo tiempo estamos preparando la localización de la producción para construir capacidad industrial en Europa y servir mejor a los clientes locales”, explicó Haigang.
La estrategia no es nueva: BYD y Chery también barajan fábricas en el continente, conscientes de que ensamblar vehículos dentro de la Unión Europea no solo esquiva impuestos, sino que mejora la percepción de marca frente a los consumidores europeos.
Un mercado cada vez más competitivo
El desembarco de GAC se produce en un momento en el que los fabricantes chinos están ganando cuota de mercado a gran velocidad. Según datos de Jato Dynamics, su participación en Europa casi se duplicó en el primer semestre de 2025, alcanzando el 5,1%, equivalente a 347.135 unidades vendidas. BYD lidera el grupo con 70.500 matriculaciones, pero marcas como JAECOO, OMODA, Leapmotor y Xpeng también crecen con fuerza.
Con precios competitivos, gamas 100% eléctricas, y cada vez mejores estándares tecnológicos, los fabricantes chinos están erosionando la posición de los tradicionales gigantes europeos. La llegada de GAC con su “ejército” de modelos Aion refuerza esa presión, obligando a Volkswagen, Stellantis, Renault y compañía a acelerar sus planes eléctricos y ajustar precios para no perder terreno.
Si la compañía logra cumplir su objetivo de 50.000 ventas anuales en apenas dos años, Europa dejará de ser un mercado marginal para GAC y se convertirá en uno de los pilares de su negocio global. La pregunta es si los fabricantes locales lograrán contener esta embestida o si el futuro del coche eléctrico europeo llevará sello chino.