Mate Rimac ha pasado de ser un desconocido a ser una de las figuras más ilustres de la industria del automovilismo. Desde sus modestos orígenes en Croacia, el prometedor ingeniero se ha consolidado como uno de los CEOs más queridos e influyentes del mercado eléctrico internacional. Su compañía, Rimac ha creado el que muchos consideran como el mejor coche eléctrico del mundo. El Rimac Nevera ha batido todos los registros habidos y por haber sobre la faz de la tierra (aunque ahora BYD ha superado alguno) y ahora adelanta que en unos años tendrá lista su prometedora batería de estado sólido.
Las baterías de electrolito sólido están consideradas por todo el mundo como el próximo paso en la evolución. Muchos, por no decir que todos, los fabricantes de la industria tienen abiertos proyectos para consolidar este nuevo formato de baterías en el futuro. Algunos están más avanzados que otros, pero ninguno, por el momento, ha conseguido resolver algunas de las cuestiones más delicadas de las baterías de estado sólido, como la producción en masa. Cada cierto tiempo sale la información de un nuevo y prometedor avance que acerca la fecha de comercialización.

Agenda concreta para iniciar la producción en 2030
A principios del pasado mes de septiembre, Rimac comunicó oficialmente que estaba trabajando en el desarrollo de sus propias baterías de estado sólido. Aunque la compañía no ha dado grandes datos sobre su nueva batería, sí se han dejado caer algunos detalles de gran relevancia. Rimac no quiere que su batería de estado sólido sea exclusiva para los coches eléctricos más caros del planeta. Los croatas buscan acercar la tecnología a la mayoría de los conductores. Por ello, ha confirmado que está en conversaciones con algunas marcas, incluidas las generalistas, para ser su suministrador oficial.
Según las estimaciones oficiales, al igual que cualquier otra batería de estado sólido prometida, Rimac asegura que ofrecerá una gran autonomía y un excelente rendimiento de carga así como una sobresaliente durabilidad. El paquete de baterías, llamado ‘Next-Gen’ combina las celdas de estado sólido de ProLigium con materiales procedentes de la división química de Mitsubishi. Las especificaciones por sí solas son sorprendentes: un 10% más pequeñas que las baterías actuales, un 20% más ligeras y con una densidad energética entre un 15% y un 25% mayor.

Lo que realmente distingue a este proyecto es el objetivo de producción declarado por la compañía. Se espera que las pruebas de validación interna concluyan a finales de 2026, la primera batería de muestra debería estar lista para 2027 y una muestra B apta para pruebas en carretera debería completarse para 2028. Dependiendo del resultado de estas pruebas, si todo sale como está programado, Rimac debería tener una batería lista para producción limitada para 2030. Ese es el año que la mayoría de fabricantes han considerado como el año de cambio a las baterías de estado sólido.