Nadie puede negar que el futuro de Porsche, al igual que el del resto de las marcas, sea eléctrico. A pesar de los contratiempos que están sufriendo, los alemanes lo tienen muy claro. Lo que pasa es que en Stuttgart saben que no pueden correr riesgos con el querido ‘nueveonce’. El primer 911 híbrido de la historia llegó hace unos meses con un sistema algo confuso que si bien no lo convierte en un híbrido per se sí que le permite disfrutar de la etiqueta ECO de la DGT. Hoy, Porsche nos presenta la versión más extrema de su 911 híbrido bautizado como Turbo S.
El 911 es un mito. Una leyenda en la industria del automóvil. El deportivo alemán por antonomasia ha superado todo tipo de situaciones favorables y complicadas. A pesar de que el mercado está cambiando su tendencia, el 911 sigue apoyándose en la tradición térmica, aunque Porsche, poco a poco, va introduciendo cambios. El nueveonce acabará siendo eléctrico, no sabemos cuando, pero mientras tanto va subiendo escalones en la irremediable escalera eléctrica. El turbo eléctrico del 911 Carrera GTS fue el primer y discreto paso.

711 caballos de potencia y 2,5 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h
Esa es la misma tecnología que se esconde ahora en las entrañas del nuevo 911 Turbo S, pero llevada al límite. Por primera vez el Porsche 911 supera la barrera de los 700 caballos, 711 caballos para ser exactos. Consta de un bloque de seis cilindros enfrentados con 3,8 litros de capacidad que cuenta con dos turbocompresores con el sistema T-Hybrid patentado por los alemanes. Se trata de un motor eléctrico instalado en las turbinas del motor que le permiten desarrollar más prestaciones en un mayor rango de trabajo del motor. Aunque lamentablemente eso no quiere decir que sea híbrido.
Porsche vende ahora su 911 más salvaje de todos con la etiqueta ECO de la DGT en formato coupé y descapotable. El coche no es capaz de desplazarse de forma 100% eléctrica, aunque sí que cuenta con una pequeña batería de 1,9 kWh que se carga durante las frenadas. Esta permite rápidas descargas de energía que los turbos reciben para introducir la mayor cantidad de aire posible en el motor. El resultado es que el Turbo S nuevo es 16 segundos más rápido que el anterior en dar una vuelta al trazado alemán de Nürburgring.

La ficha técnica oficial anuncia un tiempo de aceleración de 0 a 100 km/h en 2,5 segundos con una velocidad punta de 322 kilómetros por hora. ¿El precio de toda esta tecnología? El 911 Turbo S coupé cuesta un mínimo de 312.200 euros, el descapotable dispara la factura mínima hasta los 328.344 euros. Porsche acudirá al Salón de Múnich con la imponente presencia del 911 más potente hasta ahora fabricado. Estará acompañado del nuevo Porsche Cayenne camuflado. El SUV más grande de la casa se volverá 100% eléctrico en su nueva generación. Tendrá más de 600 kilómetros de autonomía real y se convertirá en el primer coche del mundo con carga inductiva.