Tal es el exceso de oferta de coches enchufables en China que las marcas tienen que apostar por dos vías principales para llamar la atención. Una es tirar por tierra los precios. Esta es la opción dominante entre las marcas, pero no todas pueden permitirse ese lujo, principalmente las que tienen consideración de premium. La otra vía para captar la atención de los clientes es incluir funciones que nadie antes parecía haber necesitado con el simple hecho de convertirlas en reclamos publicitarios. Esa es la opción que ha tomado MG para el último de sus SUV híbridos enchufables; el IM LS9 EREV.
IM es la división premium de MG, que a su vez es propiedad del Grupo SAIC. IM surge de la fusión entre SAIC y Alibaba, empresa primaria de AliExpress. Todos en China quieren tomar un trozo del pastel del mercado automovilístico. IM es por el momento una empresa con poco impacto en los mercados, pero sus planes son bastante ambiciosos. Hace ya meses que MG anunció la llegada de IM a Europa. Los IM 5 e IM 6 se comercializarán bajo el paraguas de MG. Una berlina y un SUV, respectivamente, cuyo precio de salida se sitúa por debajo de la frontera de los 40.000 euros.

Más de 1.500 kilómetros de autonomía
En China la oferta es más variada, incluyendo la presencia del LS9, el que por el momento se considera el buque insignia de la división. Su lanzamiento al mercado es inminente, previsto para el 12 de noviembre de 2025. Muchos chinos están esperando impacientemente su llegada. Apenas 30 minutos después de abrirse el libro de pedidos más de 8.000 unidades ya habían sido reservadas. El LS9 ofrece muchas y muy buenas características. Principalmente un sistema híbrido enchufable con batería Freevoy de CATL capaz de ofrecer un rango 100% eléctrico de 450 kilómetros y más de 1.500 kilómetros en ciclo combinado (ciclo CLTC).
El rendimiento tampoco se queda corto. El conjunto térmico-eléctrico genera 673 caballos de potencia. A pesar de ello, el precio del IM LS9 resulta bastante atractivo. La preventa, de tiempo limitado, se ha abierto con una horquilla de precios valorada entre los 336.900 y los 366.900 yuanes. Entre los 41.000 y los 44.700 euros, tras aplicar el cambio de divisa. Es muy poco precio para semejante rendimiento, autonomía, tamaño y calidad. El LS9 viene completamente equipado, incluyendo pantallas, asientos de ‘gravedad cero’, tres cómodas filas de asientos y un largo etcétera de sistemas de confort y seguridad.

También incluye una ducha en la parte trasera con su propio grifo y su propio depósito de agua. Al igual que cualquier camper moderna que se precie. IM, al igual que muchas otras marcas chinas, busca con esta ducha generar un reclamo publicitario para así atraer clientes. Su presencia es anecdótica, pero bastante significativa. Las marcas chinas se sienten en la obligación de crear este tipo de artificios comerciales para así captar la atención del vasto mercado. Otras compañías optan por sistemas diferentes, como el flotar o poder cruzar una piscina ‘nadando’. Nadie necesita algo así en un coche, pero parece que en China funciona.