Si no has tenido la necesidad de releer el titular dos veces, enhorabuena, querido lector. Pero sí, en esta época de sinergias y múltiples participaciones accionariales de unas corporaciones en otras, FAW, el fabricante chino de dominio estatal y socio de Toyota en China -fabrica, por ejemplo, el Toyota RAV4, así como berlinas de lujo y SUV eléctricos-, ha anunciado una inversión por valor de 450.200.000 € -530 millones de dólares al cambio- en Leapmotor, una marca de la que Stellantis adquirió el 20% por 1.500 millones de euros en 2023.
¿De locos? Sí, ó sólo negocios puros y duros. Lo cierto es que Leapmotor, que acaba de celebrar su 10º aniversario hace apenas unos días, va viento en popa. Tanto es así que si para 2025 sus previsiones de ventas iniciales eran de 500.000 coches en todo el mundo, a finales de noviembre ya habían vendido más de 536.000 y esperan cerrar el año con cerca de 600.000 coches vendidos.
El futuro de esta marca de Stellantis pasa por España
Pero eso no es todo: en el acto de celebración, el fundador y CEO de esta marca participada por Stellantis, Zhu Jiangming; adelantó que, para 2026, el objetivo de ventas es alcanzar el millón de coches y que, a lo largo de la próxima década, quieren comercializar 4.000.000.
Un factor esencial de ese objetivo pasa por el devenir de la marca en Europa de la mano de su socio Stellantis. Y por ahora, no podía ser mejor.
Comercializada en España desde el año pasado, Leapmotor ya vende en nuestro país tres modelos: el urbano Leapmotor T03-lee nuestra prueba-, el SUV eléctrico grande Leapmotor C10 -probamos su versión REEV- y el SUV compacto eléctrico Leapmotor C10.
El; y este último pasará a fabricarse a lo largo de 2026 en una de las plantas que el Grupo Stellantis tiene en España, en concreto en la de Figueruelas, en Zaragoza. Allí también se fabricará el Leapmotor C05, un compacto eléctrico que llegará al mercado europeo el año que viene.
Pero China también quiere controlar su futuro
Leapmotor es un fabricante privado que inició su andadura en 2014. Sólo 10 años después, comienza a apuntar al éxito internacional. Y el gobierno de China no quiere perder totalmente el control sobre esta marca y su tecnología.
Es por eso que FAW, la marca china de propiedad estatal, lleva meses intentando cerrar una participación con ellos. De hecho, y tal y como apuntan medios chinos, ambas marcas iniciaron conversaciones el pasado mes de marzo, tras la firma de un memorando de acuerdo; pero la noticia final se produjo el pasado 28 de diciembre: FAW invertirá 450.200.000 € -530 millones de dólares- a cambio del 5% de su accionariado; esto es, 74.832.245 acciones.
Según la información local, la inversión de FAW, el socio local de Toyota, servirá para el desarrollo de la tecnología eléctrica y de híbridos enchufables. Así, se prevé que hasta el 50% de esa inversión irá destinada a I+D, mientras que un 25% se utilizará para fines corporativos generales; y el 25% restante, para ampliar su red de venta y servicios en China.
Entonces, ¿cómo queda ahora la posición de Stellantis en esta marca, que fabricará sus coches en España? Bueno, seguirá como accionista mayoritario, ahora con un 18,99% del accionariado total, y mantendrá en exclusiva la distribución y gestión de su gama en Europa.