El CEO de Volvo, Hakan Samuelsson, analiza el año: “Las ventas cayeron principalmente debido a dos vehículos"

La marca sueca es optimista a pesar de haber tenido un año complicado. Volvo defiende que Europa no se puede bajar del carro de la movilidad eléctrica como ya muchos adelantan.

La segunda etapa de Hakan Samuelsson al frente de Volvo está cargada de retos.
La segunda etapa de Hakan Samuelsson al frente de Volvo está cargada de retos.
15/12/2025 07:30
Actualizado a 15/12/2025 07:30

Tal y como establece la normativa europea actual, la venta de vehículos de combustión quedará prohibida a partir del 1 de enero de 2025. La estrategia continental está cargada de retos y complicaciones, pero cada vez son más los que se han levantado en contra de la electrificación total del parque. De hecho, Bruselas está ultimando los preparativos para lanzar una nueva hoja de ruta, pero no todas las marcas defienden volver a la combustión. Volvo es la que más trabajo ha hecho para electrificar al 100% su flota y, por lo tanto, es una de las que más defiende el objetivo de cero emisiones de la UE a partir de 2035. A pesar de la caída de las ventas de sus coches eléctricos.

Volvo forma parte del Grupo Geely, uno de los mayores conglomerados automovilísticos de China, al igual que Polestar, Lynk & Co, Smart o Zeekr, entre otras. A pesar de que la marca sigue operando con cierta independencia desde su sede en Gotemburgo, Suecia, la financiación es de China. Los suecos tienen que defender ante los chinos cada una de las decisiones que tomen. El último año ha sido demasiado agitado para los intereses de la empresa. Tras haber llevado a Volvo a su mejor época, el ya jubilado ex CEO, Hakan Samuelsson, ha vuelto a tomar las riendas para reconducir la situación.

Volvo EX60
Volvo planea un 2026 cargado de lanzamientos electrificados.

Dos coches tienen la culpa de que Volvo haya caído en ventas

El director ejecutivo se muestra cauteloso y optimista tras un año irregular. Las ventas han caído y se atribuyen principalmente a tres modelos y a problemas iniciales con el lanzamiento. “Las ventas cayeron principalmente debido a dos vehículos: el EX30 y el EX90”, ha reconocido durante una entrevista a Automobilwoche. En el caso del pequeño EX30, el modelo eléctrico más vendido de la compañía, la reubicación de la producción de China a Europa (Bélgica) ha afectado al volumen de ventas. A pesar de ello, el Volvo EX30 sigue mostrando una buena salud comercial y en Suecia esperan que las ventas reputen con el nuevo año.

En cuanto al gran Volvo EX90 la situación es algo más complicada. A pesar de sus excelentes cualidades, los suecos han tenido muchos problemas de fiabilidad por culpa de la avanzada tecnología incorporada. Desde el radar LiDAR hasta los asistentes a la conducción. Tal es el volumen de fallos que Volvo ha decidido suprimir algunos de esos elementos críticos. Al EX90 le costará recuperarse de esos primeros malos pasos. El propio Samuelsson ha asegurado que “no estuvimos realmente satisfechos hasta mediados de este año, por lo que el volumen de ventas también fue bajo en este caso”. Al mismo tiempo, Volvo busca fórmulas de electrificación alternativas: los híbridos enchufables.

Volvo Eléctrico
El EX30 ha sufrido por el cambio de fábrica. De China a Europa.

Los PHEV ganarán peso en Volvo de cara a finales de la década. Modelos como el XC70 Plug-In Hybrid ofrece hasta 1.200 kilómetros de autonomía con una sola carga. Hakan Samuelsson espera tener un buen 2026. Esperan cosechar 800.000 matriculaciones en todo el mundo por primera vez en su historia, pero es "muy difícil predecir cómo evolucionará el mercado". A pesar de todo, Volvo se mantiene firme en su estrategia y defiende que Europa mantenga la hoja de ruta. Si bien reconoce que es "difícil sin los incentivos", Samuelsson advierte contra la posibilidad de volver al motor de combustión clásico y echa la culpa a países como España por hacer “muy difícil” la venta de coches eléctricos.